Los últimos meses han sido de pequeños pero potentes pasos. Gracias al esfuerzo de muchas personas, hemos compartido talleres, formaciones y reuniones junto a trabajadores y trabajadoras migradas y racializadas, con liberados y liberadas de diferentes eskualdes y federaciones y con organizaciones del ámbito de la lucha antirracista y contrarias a la Ley de Extranjería.
Caminamos hacia un sindicalismo antirracista, porque queremos construir una Euskal Herria solidaria y soberana que sea garantía de todos los derechos de las personas trabajadoras migradas y racializadas; porque es fundamental profundizar en la práctica para combatir el racismo para quienes queremos ser un ámbito de organización para todas y todos los trabajadores, como pata fundamental de la construcción de una nación vasca internacionalista, solidaria y de acogida, en la que los y las trabajadoras migradas y racializadas tienen que ser reconocidas en derechos y oportunidades.
En este marco, hemos organizado un festival en Durango, bajo la denominación Sindikalismo Antirrazista Baterantz. Lo hemos hecho a modo de espacio de encuentro, reconocimiento e inter-aprendizaje colectivo en el camino hacia la construcción de nuestra praxis sindical antirracista. Así las cosas, el programa ha recogido diferentes momentos y opciones: mesas de experiencias, talleres prácticos, sesiones temáticas, conciertos, feria antirracista…
Desde LAB, asumiendo nuestro compromiso de enmendar la deuda colonial que tenemos como sociedad, estamos dando pasos concretos para mejorar las condiciones de empleo de los y las trabajadoras migradas y racializadas en Euskal Herria. Como sindicato, esta es nuestra responsabilidad y oportunidad política.
En este sentido, en el festival de Durango hemos abordado, todas y todos juntos, diferentes temas: experiencias de lucha y organización colectiva, la militarización de las fronteras, el derecho a la vivienda y al empadronamiento desde la perspectiva de las personas migradas y racializadas, los privilegios y la supremacía blanca, las grietas a la Ley de Extranjeria española que pueden abrir el asilo político y el arraigo laboral y la acción sindical antirracista.
Los y las trabajadoras migradas y racializadas han sido las protagonistas de la jornada, pero los y las liberadas y delegadas del sindicato, cada persona desde su lugar y posición, también han realizado su aportación. Y es que ha sido una jornada para escuchar, aportar y compartir.
Cinco ejes de trabajo
El grupo motor del festival antirracista organizado en Durango ha estado semanas trabajando y preparando esta jornada; y es que ha sido parte de un proceso colectivo en el que estamos involucradas e involucrados. Como parte de este recorrido, y siendo conscientes de que el encuentro de Durango es el principio de una nueva fase, en adelante nuestra labor tendrá conco hipótesis de trabajo:
-No basta con no ser racista. Desde LAB queremos desarrollar una práctica sindical antiracista y en esa dirección trabajaremos firmemente en los próximos años.
-Re-inventaremos nuestra praxis sindical desde una perspectiva integral. LAB se reforzará como herramienta para Todas las trabajadoras.
-Contribuiremos a desmontar desde la acción sindical integral las múltiples opresiones que atraviesan a las trabajadoras migradas y racializadas en Euskal Herria.
-Las personas trabajadoras migradas y racializadas tenemos que ser reconocidas como sujetas protagonistas activas. Desde la lástima, ¡nada!
-Desde LAB sumamos en la construcción de un pueblo vasco solidario y de acogida, con soberanía popular y justicia social.
Al fin y al cabo, desde LAB aportamos nuestro granito de arena con la ilusión y convicción de que la construcción de un sindicalismo antirracista es dar pasos de fraternidad, reconocimiento y justicia social que contribuyen en la construcción de la Euskal Herria que queremos.
