Comunicado de los sindicatos LAB, ELA, CCOO, ESK, USO y UGT al hilo de la comparecencia de hoy:
Tras las 4 jornadas de huelga en mayo y junio, hay convocadas otros 3 días para el 21, 22 y 23 de septiembre.
Tal y como se anunció en junio, el sector del Metal de Araba está llamado a continuar con las dinámicas de huelgas que se iniciaran en mayo de cara a lograr un convenio que dignifique las condiciones laborales de las personas que trabajan en el sector.
En junio, el SEA suspendió la reunión previa a la huelga del día 30 y en el siguiente encuentro de la Mesa Negociadora, mantuvo su actitud inmovilista e irresponsable, bloqueando la negociación y despreciando la propuesta de la mayoría sindical.
A pesar de ello, los sindicatos que formamos la mayoría sindical propusimos retomar la negociación en septiembre, de cara a intentar desbloquear la situación, convocando nuevas reuniones de la Mesa Negociadora, a raíz de lo cual nos reuniremos el próximo día 8 de septiembre.
Las reivindicaciones principales del sector son: salarios vinculados al IPC, bajada de la jornada laboral, limitación de la eventualidad y la flexibilidad, salud laboral, igualdad real, mejorar los complementos por Incapacidad temporal,… entre otros. Y en un contexto de subida generalizada de precios, donde aumenta sin parar el coste la vida, cobra una importancia central el mantenimiento del poder adquisitivo, para que las personas trabajadoras no seamos cada vez más pobres.
Por todo ello, esperamos que el SEA recapacite y acuda a la mesa negociadora del día 8 con una actitud que facilite el acuerdo. Esperamos que se encuentre a la altura del momento histórico que estamos viviendo tanto en el sector como a nivel más global y actué con responsabilidad. En sus manos queda evitar otras tres jornadas de huelga que paralicen el sector.
Por último, hacemos un llamamiento a los y las trabajadoras del metal de Araba, desde los pequeños talleres hasta las grandes empresas, a que participen, acudan y apoyen las diferentes iniciativas que llevaremos a cabo de cara a lograr el objetivo, que no es otro que conseguir el convenio que el sector necesita. La organización y la lucha son las herramientas más poderosas que tiene la clase trabajadora, y nos toca ejercerlos para defender nuestros derechos y nuestras condiciones laborales.