El sindicato LAB ha presentado alegaciones al proyecto de decreto presentado por el Gobierno Vasco, solicitando que la suspensión del proceso. LAB observa la intención de prolongar un modelo que está totalmente agotado. El modelo que hemos conocido hasta ahora se ha limitado a legitimar la actitud de la patronal y el Gobierno y esta última iniciativa también comparte objetivo, dar continuidad al modelo vigente hasta la fecha.
El decreto está cojo desde el inicio, ya que no se ha garantizado ningún proceso participativo. Por parte del Gobierno Vasco no se ha compartido ninguna intención de realizar el decreto, sólo se nos ha dado la posibilidad de presentar alegaciones, sin tener ninguna otra relación. Desarrollar el proceso así muestra que no hay ninguna voluntad de fomentar un verdadero proceso de participación ni ninguna voluntad de desarrollar un trabajo conjutno. Es estéril porque no respeta las mayorías. No se va a garantizar la participación de la mayoría sindical. No estamos ante un proceso que tenga en cuenta y respete las mayorías democráticas.
Se desprecia al derecho a decidir de una de las partes. No responde a un modelo participativo de verdad. Una de las críticas que ha realizado LAB hasta la fecha a la mesa de diálogo social es que se trata de un espacio para ratificar decisiones tomadas de antemano, esto es, sin que las partes seas escuchadas y sin otorgar a estas el derecho a decidir. Eso sí, otorga a la patronal la capacidad de veto. Vemos que este decreto sigue por el mismo camino, para ratificar decisiones que ya han sido tomadas, sólo tendría carácter consultivo y por lo tanto, no responde a una verdadera participación.
El derecho a decidir es la clave para un verdadero modelo de participación. LAB destaca la necesidad de crear un Marco Vasco de Relaciones Laborales y Protección Social (MVRLPS), para construir el ámbito laboral y social que decidamos como colectivo y como pueblo. Lo que necesitamos es una participación que tenga como eje y base a trabajadores y trabajadoras en el camino de trabajar y crear el Marco Vasco. Una iniciativa de este tipo debería tener la vocación de trabajar en la construcción del MVRLPS, pero esta propuesta de decreto no responde a ese objetivo, no responde a las verdaderas necesidades sociales y laborales.
Plantea una composición y un funcionamiento totalmente antidemocráticos. La composición que se regular en el proyecto de decreto no responde a la realidad social y sindical actual, no se toman en cuenta las mayorías sindicales y las proporciones de la actual representación. Su composición abre la puerta a cerrar acuerdos con la minoría –la aceptación de uno de las partes del ámbito sindical sería suficiente para ello- acuerdos que no tendrían apoyo social y de muy corto recorrido.
Por todo ello, LAB se muestra crítico con la iniciativa del Gobierno Vasco de institucionalizar el diálogo social y junto con la presentación de alegaciones, solicita la suspensión del proceso.