En la reunión de la mesa sectorial de se han abierto puertas por parte de Osakidetza a negociar mejoras en las condiciones laborales de la plantilla, pero desde LAB le exigimos que dé los pasos necesarios para que esos ámbitos de negociación se conviertan en realidad y poder comprobar si verdaderamente hay, por parte de la Dirección, una verdadera voluntad de negociación real.
Desgraciadamente, no es la primera vez que Osakidetza abre estas puertas en falso, con el único objetivo de aparentar una actitud negociadora. Por esta misma razón, apremiamos a Osakidetza a abrir de forma inmediata la negociación real de los temas puestos encima de la mesa, como son el Acuerdo de Condiciones de Trabajo, la OPE 18-19, el desarrollo profesional y la ampliación y estabilización de la plantilla actual y futura.
Destacamos como novedad que Osakidetza ha traído a la reunión de hoy una propuesta de convocatoria extraordinaria del Desarrollo Profesional. Siendo un paso positivo, y a la espera de poder analizar la propuesta, desde LAB hemos reclamado la necesidad de un nuevo modelo de Desarrollo Profesional más allá de una convocatoria extraordinaria. Aun así, de forma provisional, defenderemos una convocatoria extraordinaria que acabe con los agravios comparativos que se producen en este momento, derivados del modelo actual y la paralización de convocatorias que Osakidetza impuso en su momento.
Por su parte, respecto a la negociación sobre el Acuerdo de Condiciones, nos parece adecuado comenzar con el apartado de Licencias y Permisos, pero introduciendo también en esta primera fase los derechos sociales, euskaldunización y jornada laboral, junto a un plan de rejuvenecimiento de la plantilla. En una segunda fase hemos propuesto acometer el régimen retributivo del personal. En este sentido, LAB ha reclamado la necesidad de ir más allá de una simple actualización del convenio y llevar a cabo una negociación de un nuevo acuerdo ambicioso adaptado a la situación del siglo XXI y la situación actual y futura de Osakidetza.
Respecto a la nueva OPE 18-19, consideramos que, siendo necesaria, las 3.535 plazas planteadas siguen siendo insuficientes para estabilizar la plantilla y hacer frente a los retos presentes y futuros de Osakidetza. Como en el resto de administraciones vascas, es necesario convocatorias de procesos de consolidación y para ello, necesitamos una ley propia que nos dote de instrumentos suficientes. Por otra parte, seguimos exigiendo un nuevo modelo de OPE y, sobre todo, una OPE limpia sin corrupción, como estamos defendiendo en el proceso penal abierto.
Por su parte, LAB ha llevado la denuncia del proceso de vacunación del personal de Osakidetza que se está llevando a cabo, destacando el lento ritmo, la desigualdad entre las diferentes OSIs y, sobre todo, la falta de información a la plantilla y a la parte social del propio proceso de vacunación.
Además, hemos planteado a Osakidetza la necesidad de equiparar las condiciones económicas y laborales de su personal, ya que actualmente se producen agravios comparativos en diversos ámbitos, por ejemplo, en aspectos como el complemento de hospitalización.
Finalmente, Osakidetza ha puesto encima de la mesa el Plan de Igualdad, que se ha estado negociando en la Comisión de Igualdad, para que hoy mismo lo ratificáramos o no. LAB, a pesar del enorme trabajo y aportaciones realizadas en la comisión de igualdad, no podemos ratificarlo a día de hoy porque aunque se han incluido muchas de nuestras propuestas, otras han quedado fuera, como la contratación de técnicas de igualdad en cantidad suficiente para llevar a la práctica este plan, lo que es una línea roja para nosotras. Es imposible llevar el plan a cabo sin medios suficientes. No queremos un papel mojado. No entendemos las prisas de Osakidetza, tras años sin tener un Plan como marca la ley, y además, consideramos indispensable que el Plan vaya acompañado del Protocolo de acoso sexual y por razón de sexo, todavía en proceso de negociación.