El TSJPV resuelve que la movilidad funcional impuesta por la empresa a la delegada de LAB vulneró el derecho a la representación sindical, y por lo tanto condena a la multinacional a reponer a la trabajadora a su puesto de trabajo, abonar las diferencias salariales provocadas por el cambio e indemnizarla por el daño ocasionado.
El 21 de enero de 2020 la empresa comunicó a nuestra delegada Olaia Carrillo el cambio de puesto de trabajo y funciones, con la correspondiente perdida salarial de 53 euros mensuales. Esta decisión se produjo tras las diferentes acciones promovidas por el sindicato LAB en la empresa, y en especial la campaña contra los despidos iniciada en noviembre. Esta decisión tenía un objetivo claro, atacar la actividad sindical de nuestra compañera. Desde el sindicato LAB ya lo dijimos en febrero y lo volvemos a decir hoy, no aceptaremos ninguna ataque a la lucha sindical, y frente a cualquier ataque nuestra respuesta será clara, organización y lucha.
En este caso, los tribunales nos han dado la razón, pero éste no es final de ningún camino, porque la lucha por unas condiciones dignas en Ikea continúa. Y tenemos claro, que en IKEA seguiremos plantándonos ante cualquier injusticia. Y como siempre hemos dicho, el único camino es la lucha.