La firmeza de la nulidad de ese ERTE supone que la empresa deberá abonar a la plantilla los salarios de todos esos meses como si hubiese estado trabajando y también todo el tiempo de prestaciones de paro de ese periodo se tendrá como no consumido, haciéndose la regulación correspondiente con el SEPE. Hoy, el comité de empresa se ha movilizado en la Virgen Blanca de Gasteiz, exigiendo empleo digno y con futuro.
Comunicado del comité de empresa:
El Comité de Empresa de SDA Factory quiere informar que el Tribunal Supremo (TS) ha confirmado la nulidad del primer ERTE impuesto por la empresa entre septiembre y diciembre de 2021. A finales de ese año el Juzgado de lo Social de Gasteiz ya declaró en un primer momento la nulidad, ante mala fe negociadora de la empresa al denegar información importante al Comité de Empresa durante la negociación, lo que según el Juzgado alimentaba las dudas del Comité sobre la existencia de un verdadero proyecto empresarial con futuro. Esa primera sentencia nula, fue confirmada por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) y ahora ha hecho lo propio el TS, al declarar directamente la inadmisión a trámite del recurso de casación presentado por la empresa.
La firmeza de la nulidad de ese ERTE supone que la empresa deberá abonar a la plantilla los salarios de todos esos meses como si hubiese estado trabajando y también todo el tiempo de prestaciones de paro de ese periodo se tendrá como no consumido, haciéndose la regulación correspondiente con el SEPE.
El Comité considera que se confirma una cuestión evidente: la empresa ha actuado de mala fe en las negociaciones, ocultando información necesaria. Esta actitud ha sido continua desde que la empresa se hizo cargo de esta fábrica y se ha extendido a todas las negociaciones de los ERTE siguientes, así como a las de las condiciones laborales y garantías de futuro para la plantilla.
Queremos recordar que la plantilla ha pasado de 232 personas en el momento de la compraventa a las 76 actuales, estando entre quienes se han ido numerosos personas de vital responsabilidad en la empresa. Se creó una empresa “fantasma”, sin dar explicaciones, en el mismo domicilio social y con igual actividad que la desarrollada en la fábrica, y que posteriormente se extinguió sin ofrecer información alguna. Dejó de aplicar el convenio que teníamos con BSH, pasándonos al Convenio Estatal del Metal y a las tablas salariales del Convenio del Metal de Araba (que actualmente nos aplica). Nos impuso un nuevo sistema de trabajo por el cual el rendimiento máximo anterior es el mínimo actual. Después del primer ERTE anulado nos ha impuesto otros 2, pendientes de juicio, y se nos anuncia otro más, antes incluso de acabar el actual, consumiendo abusivamente las prestaciones de desempleo del personal y accediendo irregularmente a recursos públicos, como se ha derivado de está ultima sentencia. Durante este tiempo se ha estado desviando carga de trabajo a otros sitios; las negociaciones del convenio de empresa permanecen estancadas, sin que la intervención del PRECO y del Departamento de Trabajo hayan supuesto esperanza ni avance alguno.
Es importante reflejar que la nueva propiedad B&B TRENDS ha obtenido en Vitoria-Gasteiz unos beneficios espectaculares durante la etapa de garantía de suministro con la anterior propietario BSH BOSCH, y desgraciadamente, ninguno de esos beneficios se han invertido para dotar de futuro a la planta de Gasteiz. El nuevo dueño de la planta de Ali Gobeo está castigando a la plantilla, manteniendo un escenario de completa incertidumbre y alimentando la sospecha de haber construido una operación especulativa para obtener las marcas ZELMER y UFESA, que le brindan en la actualidad brillantes éxitos pero lejos de nuestra planta, a costa de demantelar una empresa de reputada solvencia.
Por todo ello, la plantilla sigue movilizándose, como ha hecho hoy en esta concentración en la Virgen Blanca de Gasteiz, reivindicando un un empleo digno y con futuro. Asimismo, seguimos apostando por la negociación para buscar un acuerdo que asegure unas condiciones laborales dignas para la plantilla y unas garantías de que el empleo se va a mantener y la actividad industrial se va a realizar aquí y no se va a deslocalizar o incluso desmantelar la propia fábrica. Precisamente, con el objetivo de buscar fórmulas para evitar la deslocalización e impulsar el fortalecimiento de la fábrica, el Comité ha solicitado una reunión con el Departamento de Industria del Gobierno Vasco.