Aunque ha obligado al Departamento de Educación a poner sobre la mesa una propuesta escrita, seguirán adelante con la dinámica de huelga. Así, realizarán cinco días de huelga, del 12 al 16 de mayo.
El profesorado de la enseñanza pública de la CAV ha secundado nueve jornadas de huelga entre enero y abril, convocadas por los sindicatos LAB, STEILAS, ELA y CCOO, que cuentan con una representación del 90%. En la última reunión de la semana pasada, el Departamento de Educación sólo presentó un calendario de negociación. Ayer por la tarde les hizo llegar una propuesta, pero sigue sin dar una respuesta adecuada a los contenidos reivindicados. De hecho, falta contenido, concreción y garantías. Y aunque el Departamento de Educación es consciente de ello, lo plantea como un ultimátum descartando la posibilidad de negociación. La cita de mañana sólo tiene como objetivo la firma. Ante ello, los cuatro sindicatos convocantes de estos ciclos de huelga han anunciado que no lo firmarán.
Por lo tanto, las exitosas huelgas y movilizaciones realizadas hasta ahora tendrán continuidad con otras 5 jornadas de huelga, los días 12, 13, 14, 15 y 16 de mayo.
El acuerdo regulador del profesorado vigente data de 2010, por lo que el Gobierno Vasco lleva 15 años sin renovarlo. En las huelgas realizadas, los trabajadores y trabajadoras han trasladado claramente al Departamento de Educación la necesidad de negociar el acuerdo aquí y ahora. Aunque el Departamento de Educación ha declarado que tiene la puerta abierta a la negociación, la realidad ha sido otra: actitud intransigente, escenificación, reuniones sin contenido…
Además, al contrario que en otros sectores, el Gobierno Vasco ha utilizado el chantaje para desactivar las huelgas y no ha aprovechado las oportunidades para negociar, prolongando el bloqueo. Más allá de propósitos y palabras bonitas, los sindicatos exigen contenidos y concreciones.
En este ciclo de huelgas, el profesorado, con la fuerza expresada en la calle, han lanzado mensajes muy claros al Departamento de Educación: acordar medidas concretas para aliviar las cargas laborales crecientes, mejorar las condiciones de jubilación y desarrollar el plan de rejuvenecimiento de las plantillas, recuperar el poder adquisitivo perdido y garantizar el empleo público y estabilizar los puestos de trabajo ante las fusiones y cierres de centros públicos que se están decidiendo unilateralmente, aprovechando la bajada de la natalidad.
Asimismo, los sindicatos piden que se pongan en marcha políticas educativas que euskaldunicen todo el sistema público de educación, que se preserve la salud laboral de los trabajadores y trabajadoras, y que se pongan los medios para poder desarrollar planes estables de igualdad y coeducación de calidad, así como que se eliminen los recortes impuestos en los últimos años.
El Departamento de Educación lleva años imponiendo unilateralmente medidas y esa arrogancia es la que les ha llevado a esta situación. Es hora de negociar las condiciones laborales del profesorado. Así, los sindicatos exigen al Departamento de Educación que elabore propuestas con contenido, concreción y garantías sin ningún tipo de condicionante.
Para reforzar la educación pública es imprescindible aumentar la inversión, mejorar las condiciones laborales y dotar de recursos a la escuela pública. El objetivo es llevar a cabo una negociación real para conseguir las reivindicaciones expresadas, y los sindicatos tienen claro que junto con las movilizaciones de las personas trabajadoras conseguirán poner la educación pública en el centro y mejorar las condiciones laborales.