La propuesta firmada con la empresa por los sindicatos UGT, CCOO y USO no vincula las subidas salariales al IPC para ningún año de vigencia. LAB considera que las mejoras recogidas en el acuerdo son claramente escasas, teniendo en cuenta que los trabajadores y las trabajadoras llevan más de medio año de dura lucha.
Si este preacuerdo se confirma finalmente, el principal punto sobre el que se ha sustentado históricamente la negociación colectiva de Bilbobus, que es mantener la subida de retribuciones ligada al IPC, quedará definitivamente soterrado y será imposible recuperarlo en futuras negociaciones. LAB tiene claro que ligar los salarios al IPC es la vía para no empobrecer a los trabajadores y trabajadoras. Y es que si a partir de ahora el índice de referencia para las subidas salariales de la plantilla de Bilbobus es la subida del funcionariado, ello conllevará perder poder adquisitivo progresivamente, ya que los y las funcionarias llevan más de una década denunciando precisamente eso.
LAB critica la actitud de los sindicatos que han apoyado el acuerdo, ya que ahora, tras casi siete meses de movilizaciones y más de un mes de huelga indefinida, la mayoría sindical ha puesto en bandeja a la empresa y al ayuntamiento el eliminar esa vinculación con el IPC. Así, a partir de ahora, será el gobierno de turno en Madrid el que imponga a los trabajadores y las trabajadoras de Bilbobus sus condiciones económicas.
En noviembre de 2023, la empresa ofreció un convenio con vigencia para el periodo 2022-2026, que incluya la subida de las y los funcionarios para esos años. «Si entonces se les dijo que no, ¿por qué han tenido que pasar seis meses en huelga para acabar pactando algo tan parecido a lo de noviembre?», se pregunta LAB. La mejora del 1,5% respecto a la oferta inicial para los años 2022 y 2023 es, para LAB, claramente insuficiente, especialmente teniendo en cuenta que la lucha se ha prolongado durante siete meses.
Además, en cuanto al personal contratado al 62% de jornada laboral, las y los trabajadores pasarán al grupo del 100% según el orden que tenían en la bolsa en febrero de 2022, y de momento serán sólo cinco personas. Es más, esta modalidad contractual no desaparecerá y las vacantes que queden serán cubiertas por eventuales de la bolsa de trabajo. En consecuencia, el grupo de los del 62% seguirá existiendo, pero lo conformarán otras personas. Esto, según LAB, no es solucionar un problema, sino cronificarlo, y el sindicato ha querido recordar que el único beneficiario de la creación de estos colectivos es la empresa, ya que sólo conllevan fragmentación de la plantilla, frustración de los trabajadores y las trabajadoras y precariedad.
Además, LAB ha recordado que las y los trabajadores de Bilbobus dan un servicio esencial que debe ser prestado obligatoriamente por el Ayuntamiento de Bilbo. Así, el sindicato ha destacado que el ultimátum para resolver el contrato no es más que el arma de presión que se está utilizando contra los trabajadores y las trabajadoras.