Hemos tenido conocimiento de un nuevo Plan de Choque para el sector Aeronáutico, suscrito entre el Gobierno de España, la Sepi, CCOO y UGT y la patronal TEDAE. Dicho plan consiste en financiar a las principales empresas del sector aeronáutico con dinero público. Es un Plan realizado a la medida de la patronal, cuantificado según algunos medios en 700 millones de euros.
La financiación pública es necesaria en los sectores considerados estratégicos, pero tiene que estar supeditada a obtener un bien social, en este caso, la creación o el mantenimiento de empleo directo e indirecto.
En el caso de las empresas aeronáuticas ubicadas en Euskal Herria, la destrucción de empleo ha sido brutal en las empresas más importantes: ITP, ITP-Aero Castings-PCB, Alestis, Aernnova, Fibertecnic, Burulan, Gmpasa, Feliu & Madinabeitia Servicios a la Industria, Metaltrec, Egile, Aciturri o Mtorres son solo algunos ejemplos. En lugar de hacer uso de otras alternativas, han apostado por el despido.
En esta situación, el Plan de Choque aprobado no es más que un Plan de Financiación de empresas que han destruido empleo, pues no se establece ningún compromiso para con el empleo, más allá de declaraciones de intenciones. La ciudadanía debe saber que se va a premiar a quienes han destruido empleo financiado sus beneficios.
Por lo tanto desde LAB exigimos:
A los empresarios que han realizado despidos en el sector de la aeronáutica aprovechándose de la pandemia, que readmitan a los y las trabajadoras despedidas y que anulen los procedimientos de despidos en marcha.
Que la implantación de ese Plan de choque, y la estrategia de política industrial y financiación pública se decida en las instituciones de Euskal Herria.
Que tanto el Gobierno de Navarra como el Gobierno Vasco condicionen la financiación de las empresas del sector de la automoción a la readmisión de los y las trabajadores despedidos y despedidas por efecto del Covid y que exijan a las empresas receptoras de dichas ayudas el mantenimiento del empleo.