Se presenta un texto en el que todo son interrogantes. El primer condicionante es que para que La Milagrosa pueda seguir adelante tiene que haber matrícula cuando la tenemos cerrada desde enero. Lo único que el Gobierno Vasco nos asegura es la reversibilidad de matrícula.
A falta de dos meses para finalizar el curso se nos plantea crear una cooperativa, opción que se valoró en enero pero que a día de hoy no es viable.
Se propone un período de transición en las dependencias vacías del edificio de Minas sin especificar en qué condiciones podríamos estar en él. ¿Por qué ahora se nos ofrece este edificio cuando desde un principio se nos ha denegado rotundamente?
Creemos que con esta enmienda se busca culpabilizar del posible cierre a la propia Comunidad Educativa y tendremos que escuchar que se nos ha dado una opción y no la hemos querido materializar. No es así, nosotras y nosotros seguimos defendiendo la continuidad del centro con una planificación fiable y seria a largo plazo.
Tenemos muy claro que el centro se podría cerrar por esta enmienda a la totalidad y sus impulsores, teniendo como objetivo sus propios intereses y no a las personas. Ante las dos opciones que mañana se debatirán, tanto las familias como el colectivo de trabajadores y trabajadoras optamos por conseguir una titularidad con la que seguir trabajando o por la publificación. Para ello, exigimos a los partidos que forman parte de la Comisión de Educación que lleguen a un acuerdo para que el proyecto educativo pueda seguir adelante en el futuro, con soluciones viables que hagan que el centro en su conjunto se mantenga en pie.