En el día de hoy hemos vivido una nueva demostración de las consecuencias directas de la subcontratación de nuestros servicios públicos básicos. El derecho a la huelga ha sido vulnerado por la empresa UTE Bilboko Argiak, subcontrata responsable del alumbrado en el Ayuntamiento de Bilbao, cuando, en el segundo día de huelga en defensa del empleo de un compañero, trabajadores que no forman parte de la plantilla han sido sorprendidos realizando labores dirigidas al montaje de eventos, actividad expresamente excluida por la Delegación Territorial del Trabajo. Los hechos han sido denunciados en ese momento ante la policía.
Desde LAB, nos reafirmamos en la tesis de complicidad total entre ayuntamiento y subcontrata. Denunciamos tanto las prácticas fraudulentas de la UTE, quien tendrá que responder ante Inspección de Trabajo, como la falta de control total ejercido por el consistorio de Bilbo, quien mira para otro lado sistemáticamente ante la vulneración de derechos en las subcontratas que realizan los servicios públicos.