El paro ha aumentado ligeramente en Hego Euskal Herria, un 0,1% respecto al mes anterior, mientras que ha descendido un 5% respecto al año anterior. El descenso se ha producido en Araba y Gipuzkoa, mientras que en Nafarroa y Bizkaia ha subido.
En lo que respecta a Nafarroa, hemos de subrayar que el paro en menores de 25 años ha aumentado un 4,8% respecto al mes pasado.
En términos interanuales, el paro masculino bajó un 7,3%, mientras que entre las mujeres sólo bajó un 3,3%. Respecto al mes pasado, sin embargo, el paro masculino ha aumentado, mientras que el femenino ha descendido ligeramente. No estamos ante una tendencia, sino ante un mercado laboral inestable donde la juventud o las trabajadoras son consideradas mano de obra barata, empleadas temporalmente o en sectores precarizados.
El empleo no se está destruyendo masivamente. Sin embargo, debemos poner la atención en la calidad del empleo y en la forma insuficiente en la que las instituciones están abordando la actual crisis ecosocial.
Por un lado, la calidad del empleo es una preocupación de primer nivel para este sindicato. Los datos de hoy vienen a confirmar que la precarización de las condiciones de trabajo y de vida es una constante en este modelo: la brecha salarial de las mujeres es estructural, las jornadas parciales están aumentando, los contratos indefinidos siguen siendo insuficientes o las y los jóvenes no pueden acceder a las condiciones materiales dignas para construir un proyecto de vida. Se vendió desde Madrid que la reforma laboral mejoraría las condiciones laborales de las y los trabajadores, pero es evidente que la reforma no ha cumplido sus objetivos y estamos obligados a movilizarnos ante la patronal.
Asimismo, el dato de desempleo en el actual contexto socioeconómico inestable no se puede analizar ni interpretar de forma aislada. De hecho, cada vez son más las y los trabajadores que viven en una situación precaria. Según el estudio que presentará LAB en los próximos días, uno de cada dos trabajadores o trabajadoras está es situacion de desempleo, está en situación de inactividad laboral o son trabajadores y trabajadoras com ingresos inferiores a 1.400 euros.
Por otro lado, es imprescindible abordar la situación también desde las instituciones. Necesitamos políticas públicas valientes para hacer frente a la crisis ecosocial que ha sido consecuencia de decisiones políticas neoliberales.
En esta situación de emergencia social, las y los trabajadores no podemos esperar y creemos que la movilización sindical y social son imprescindibles. En este sentido, el sindicato LAB está articulando un nuevo ciclo de lucha, con todas y todos los trabajadores, para toda la clase trabajadora.