Este mes de marzo se ha abierto y cerrado la mesa negociadora del Convenio de Grandes Almacenes, firmado por la patronal ANGED y los sindicatos FETICO, FASGA, CCOO y UGT. LAB se ha negado rotundamente a firmarlo. Es un convenio estatal, siendo los firmantes sindicatos que en Hego Euskal Herria apenas tienen representación y que favorece el claro objetivo de la patronal de eludir negociar con sindicatos de contrapoder que no les pongan la alfombra roja a las adaptaciones de modelo de comercio y relaciones laborales que desean imponer: cada vez más flexibles, precarias y baratas para ellos. Este convenio nos reafirma en nuestra apuesta por un marco propio de relaciones laborales.
Este Convenio establece unos salarios muy por debajo de los que tenemos de media aquí en los distintos convenios provinciales de comercio. Dicho de otra manera: estas empresas millonarias pagan a sus plantillas menos que cualquier comercio pequeño de la CAPV y Nafarroa.
Este convenio afecta exclusivamente a grandes superficies y multinacionales, empresas como El Corte Inglés, Ikea, Leroy Merlin, Fnac, MediaMark, Forum Sport… que incluso en 2020 han cerrado con beneficios millonarios. En cambio, el salario de una dependienta base de Grandes Almacenes apenas supera el SMI anual. Ante esto, el Convenio sólo plantea un aumento del 2% en dos años, tras los cuales seguirán por debajo de los convenios provinciales. Además, los mismos sindicatos firmantes, junto con la patronal, serán quienes valoren si el salario variable se cobra o no. Más incertidumbre, más precariedad.
Hablamos de salarios que cuando superan los 1.000 euros es debido a complementos e incentivos, que poco a poco están viendo reducidos porque estas empresas están impulsando la venta on-line, que supone mucho tiempo de trabajo, pero no comisiona. Por lo tanto, seguimos perdiendo poder adquisitivo.
Precisamente, la adaptación a la venta on-line es la que justifica que, amparándose en la necesidad de competir con plataformas que trabajan 24 horas, las plantillas estén obligadas a 5 domingos anuales de trabajo a puerta cerrada en labores relacionadas con la venta on-line (en un Convenio que ya incorpora el trabajo de venta el 34% de los domingos). De esta manera, abren un resquicio para obligarnos a trabajar los domingos, aunque sea cerrados de cara al público. Esto traspasa una línea roja para nosotras y nos tendrán enfrente: con puertas abiertas o cerradas, no a la apertura en domingos y festivos.
Llaman garantizar el empleo frente a la transformación del modelo comercial debido a la digitalización a establecer más facilidades a la movilidad geográfica y funcional, flexibilizando así nuestras condiciones e impidiendo que podamos organizar nuestras vidas a largo plazo. Hoy en este departamento, mañana en este otro. Hoy en este centro de trabajo, mañana en ese otro. Hoy en esta empresa del Grupo, mañana en aquella otra. Lo llaman “salvaguarda del empleo”, mientras hacen EREs de reducción de plantilla, como ha hecho Forum Sport, como está haciendo ahora mismo El Corte Inglés.
Y para rematar, lo llaman “convenio de transición” asegurando que estas medidas se deben a la actual coyuntura y que son temporales, como si no supiéramos que son la continuación de un camino que llevan años transitando y que son medidas que viene para quedarse. A menos que nos organicemos y digamos que no. LAB lo tenemos claro: aquí no y nos tendrán enfrente.