Nuestro sindicato ha hecho público un informe sobre el sistema tributario de Hego Euskal Herria en el que hemos subrayado la necesidad de una reforma de calado rechazando atajos que perpetúan el actual modelo. Se ha multiplicado la presión fiscal a las y los trabajadores mientras se ha mantenido la aportación de rentas de capital en las últimas décadas. Es hora de cambiar la balanza y garantizar que pague más quien más tiene.
Dicho informe, Ikusmiran 15, puede consultarse en el siguiente enlace: https://www.iparhegoa.eus/wp-content/uploads/2023/12/Ikusmiran15_2023_12_CAS.pdf
Se acaba de anunciar un crecimiento en la recaudación de las haciendas en Gipuzkoa, Bizkaia y Araba. También se acaba de acordar el Impuesto temporal sobre las Grandes Fortunas en estos dos últimos. El Parlamento de Nafarroa aprobará el 21 de diciembre una Ley Foral de modificación de determinados impuestos y otras medidas tributarias. Tanto en uno como en otro, desde el sindicato LAB sólo vemos parches y pequeños cambios que perpetúan el modelo actual y no dan pie a un debate real y que toque hueso.
Nos suelen vender como un debate complejo el que se refiere a los impuestos, pero lo que está en la base es muy simple: o se hace una política fiscal a favor de la patronal o se priorizan los intereses y necesidades de la clase trabajadora. Durante décadas se ha garantizado lo primero y eso nos ha llevado a la terrible situación en la que nos encontramos.
Nuestro País necesita transformaciones de carácter estratégico en las próximas décadas. Estamos todavía padeciendo las consecuencias de una pandemia mundial, se incrementan contextos de guerra, la crisis ecológica se acentúa y las brechas sociales se están acentuando. Para cuidar y proteger a las personas, necesitamos unos servicios públicos fuertes y de calidad. La intervención pública en los cambios necesarios en el tejido socioproductivo será fundamental y la inversión pública en pensiones, sanidad, educación, vivienda y en la construcción de un sistema público comunitario de respuesta a la crisis de cuidados es imprescindible.
Para todo ello, la recogida y redistribución de la riqueza que se genera en nuestro territorio debe ser una prioridad política. Todavía estamos lejos de la presión fiscal en la Unión Europea y eso debilita nuestro sistema público. Pero no es sólo eso, el principal problema que hay aquí es que la aportación que hacen los que más tienen es muy reducida, y en el análisis realizado se puede ver claramente que hay margen y posibilidad de multiplicar la presión fiscal a las rentas de capital.
Es una cuestión de voluntad política. Hay que abordar la reforma del sistema fiscal, no hay excusas. En el análisis que hemos realizado se recogen las principales tendencias de las últimas décadas y las propuestas del sindicato.