Los sindicatos LAB, SAE, UGT, ELA y CCOO exigiremos al Gobierno de Nafarroa mejoras inmediatas en los salarios y las condiciones laborales, así como la apertura de un proceso de negociación con la representación sindical
Cuando comenzó esta legislatura que ya llega a su fin, nadie podía imaginar el descomunal esfuerzo que iba a tener que realizar el personal de Salud con motivo de la pandemia de Covid19. La pandemia del Covid ha puesto de manifiesto tanto déficits estructurales como problemas graves en la situación de la plantilla.
Efectivamente. Médicos, trabajadoras sociales, enfermeras, administrativos, técnicos sanitarios y de enfermería, personal de cocina, de limpieza, celadores, y demás trabajadoras de Osasunbidea, ajenos todos y todas ellas a la “protección” del confinamiento domiciliario, hacían frente desde sus puestos de trabajo a una epidemia inédita, de consecuencias entonces desconocidas y que, no lo olvidemos, irrumpió en sus primeras olas en forma de enfermedad muy grave e incluso mortal, y lo hicieron en muchos casos sin materiales de protección suficientes por causa del desabastecimiento mundial, poniendo en riesgo su salud y la de los suyos.
Nadie podía imaginar por aquel entonces, que tamaño esfuerzo y semejante sacrificio que se alargó durante muchos meses, obtuviera tan mezquino reconocimiento por parte de los gobiernos del Estado y de Navarra, y que se ha traducido en la pérdida de poder adquisitivo de las y los empleados públicos. Solo desde el cinismo se puede alardear de apostar por los servicios públicos mientras se empobrece al personal que los integra y se deterioran sus condiciones de trabajo. Y solo desde el conservadurismo
más recalcitrante, por mucho que se quiera autoproclamar como gobierno progresista, se puede terminar una legislatura sin haber abordado las reivindicaciones de los colectivos profesionales de la plantilla.
No solo eso. El Gobierno de Navarra ha devaluado las mesas de negociación convirtiéndolas en un simple aparato de megafonía. Los sindicatos firmantes confirmamos que solo se trata de una pretensión de intentar conseguir que esta información unilateral, tenga la categoría de negociación o de un diálogo social en los que han demostrado sobradamente no creer ni respetar. Y lo que es más grave, ha traicionado la relación de confianza mutua con los sindicatos cuando durante toda la legislatura ha venido denegando peticiones sindicales, alegando una imposibilidad legal de incrementos retributivos que por otro lado propone para determinados colectivos profesionales.
La única premisa que han avalado es “el divide y vencerás” importándoles muy poco las condiciones laborales y la mejora de los servicios públicos.
En definitiva, que el Gobierno de Navarra ha logrado desmotivar totalmente a la plantilla de Salud, ha fulminado la Mesa General y Mesa Sectorial y la negociación y ha hartado a una representación sindical, que además de ninguneada se siente engañada. Todo un récord difícil de batir.
Hace exactamente un año, la totalidad de las organizaciones sindicales del Servicio Navarro de Salud- Osasunbidea, bajo el lema “la plantilla de Salud, abandonada” convocaban a una protesta por el deterioro de sus condiciones laborales y la ausencia en los anteriores presupuestos de partidas económicas que permitieran afrontar sus demandas.
Por todo ello, hoy, transcurrido un año de aquella protesta sin que se hayan llevado a cabo ninguna de las mejoras exigidas, los sindicatos del SNS-O, LAB, SAE, UGT, ELA Y CCOO consideran que esas mejoras laborales y retributivas para el personal de Salud no pueden demorarse por más tiempo y reclaman al Gobierno de Navarra que con este fin inicie un proceso negociador con la representación sindical.
Con este objetivo y vista la impasibilidad de la Administración Foral ante las demandas referidas, las organizaciones sindicales presentes iniciarán una serie de movilizaciones que incluyen la convocatoria de una huelga en el Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea el día 15 de febrero, y que podrían mantenerse en el tiempo de no producirse una respuesta satisfactoria por parte del Gobierno de Navarra.