La empresa de transporte urbano de autobuses de Bilbo ha presentado hoy el proyecto Medusa, que consiste en dotar a los autobuses eléctricos de la energía generada por el metro. Sin embargo, los trabajadores se han concentrado para visibilizar la otra cara de la moneda. Desde el 31 de diciembre de 2021 se encuentra en situación de ultraactividad el convenio que regula las condiciones de la plantilla y exigen a la dirección que se siente a negociar su actualización. Hay que tener en cuenta que la última actualización salarial ha sido la correspondiente al 2021.
Así, hemos denunciado la situación que está viviendo la plantilla a través de la movilización llevada a cabo hoy en las cocheras de Bilbobus. Y es que la precaridad es cada vez mayor, el hecho de que los salarios estén sin actualizar ha supuesto una pérdida de poder adquisitivo y, además, eliminan derechos unilaterales que, además de estar reconocidos y consolidados, aparecen recogidos en el convenio, como el complemento de incapacidad temporal de las pagas extras.