Hoy, 11 de abril, queremos informar del lamentable fallecimiento de un trabajador de 58 años de Arcelor Mittal de Lesaka como consecuencia del COVID-19. Antes de nada, queremos transmitir todo nuestro apoyo y condolencias a familiares y amistades, así como prestarnos para todas aquellas posibles acciones que estimen necesarias. Este trabajador, a pesar de pertenecer a la plantilla de Arcelor Mittal de Lesaka, trabajaba como pintor en la planta que Arcelor Mittal tiene en la localidad cercana de Legasa.
Este fallecimiento se podía haber evitado. LAB alertó a la empresa de que se debían tomar medidas de seguridad, más aún cuando el 13 de marzo se tuvo que mandar a casa al primer trabajador con síntomas de la enfermedad, pero no se nos hizo caso, lo que motivo que LAB interpusiera una denuncia el pasado día 17 de marzo para exigir mayores medidas de seguridad.
La realidad a día de hoy es que, según datos de la propia empresa, hay al menos 13 trabajadores en situación de baja por COVID-19 y otros más en cuarentena. Pero tampoco es una situación que se limite a estas plantas, ya que, hay más trabajadores infectados en otras plantas de la multinacional.
Esta muerte es una sacudida tremenda que nos da cuenta de la extrema gravedad de la situación actual y nos obliga a extremar las medidas de seguridad y paralizar toda actividad que no sea esencial. LAB exige a la Inspección de Trabajo que se persone en el centro de trabajo del fallecido, investigue lo sucedido y paralice toda actividad hasta que se garanticen condiciones seguras de trabajo. Asimismo exigimos a la multinacional que priorice la salud de las y los trabajadores por encima del beneficio económico y paralice toda actividad hasta disponer de un protocolo de seguridad eficaz y acordado con la representación de las y los trabajadores. No queremos entrar sanas y sanos a la fábrica y salir en un ataúd.
LAB hace un llamamiento a trabajadores y trabajadoras a participar en las iniciativas y movilizaciones que se lleven a cabo para denunciar esta muerte.