La falta de una apuesta clara en favor de la atención primaria por parte de la consejera Induráin y el director general de Salud, Carlos Artundo, no hace sino corroborar la nula intención que han tenido y tienen los gestores de Osasunbidea por dar una atención equitativa y eficiente a la ciudadanía navarra y unas condiciones laborales dignas para la plantilla. Desde el sindicato LAB hemos denunciado, y volveremos a hacerlo las veces que sea necesario, la falta de voluntad política para emprender las medidas necesarias para reforzar y dimensionar la Atención Primaria.
El Departamento de Salud pone como excusa la pandemia para realizar una serie de cambios que llevan gestándose a nivel político desde hace varios años. La prácticamente inexistente contratación de personal en los centros de salud, volcando la casi totalidad de los recursos de personal en el servicio de urgencias extrahospitalario de Pamplona, ha dejado al resto de Atención Primaria sin personal, sin recursos y sin capacidad para desarrollar su actividad de forma polivalente y resolutiva. La situación se agrava por el traslado de personal de los centros de salud y hospitales a la campaña de de vacunación, lo que va a generar problemas de calendario, libranzas y vacaciones para el personal.
Las plantillas están mal dimensionadas en los centros de salud y se hace una apuesta por algunos colectivos y servicios a costa de otros. Como ejemplo, el colectivo de Técnicos de Cuidados en Enfermería, que ha sido eliminado de centros de salud y del servicio de urgencias extra-hospitalario. Esto muestra un total desconocimiento de sus funciones y capacitación profesional; han sido incluidos o eliminados de los centros de salud sin ningún criterio claro, y no han gozado en ningún momento del apoyo de la Gerencia de Primaria. Dicha Gerencia no ha sido capaz de aprovechar la coyuntura generada por la COVID para optimizar las carencias que arrastran los centros de salud y han apostado por un modelo de atención a la demanda en lugar de un modelo preventivo, accesible, longitudinal, accesible y coordinado.
Se están recibiendo múltiples quejas sobre cómo se está gestionando la contratación que pone de manifiesto la falta de un criterio homogéneo y los agravios comparativos entre unos centros y otros. El despropósito organizativo y de gestión está provocando que los centros de salud queden desasistidos, tanto a nivel presupuestario como de recursos de personal.
Desde el sindicato LAB queremos hacer hincapié en la multitud de contratos estructurales que se están gestionando sin orden ni concierto y el pago de productividades que se está realizando de forma arbitraria, poco trasparente y con el beneplácito de algunas jefaturas que también las han disfrutado.
Constatamos el nulo interés de la Gerencia de Atención Primaria y de la propia consejera por abordar cuestiones como: dignificar las condiciones laborales de las trabajadoras, la cobertura de puestos de difícil contratación, la disminución de TIS, el aumento de la ratio de enfermeras por centro de salud, la inclusión de nuevos profesionales, la consolidación de otros y el reconocimiento de los ya existentes (tanto económica como laboralmente). Todo ello mientras se deriva presupuesto a recursos asistenciales poco eficientes.
Desde LAB defenderemos y apoyaremos las movilizaciones y reivindicaciones que se planteen para la defensa de la sanidad pública y las condiciones laborales dignas de la plantilla.