Ayer, 12 de agosto ocurrió un accidente laboral mortal, cuando el trabajador L. F. A. J, de 45 años y residente en Ribaforada, se disponía a hacer un trabajo en el tejado de una empresa para la que había sido subcontratado. Éste sufrió un accidente laboral mortal al caer de una altura de más de ocho metros.
Desde el Sindicato LAB queremos mostrar nuestro apoyo y solidaridad con las y los familiares, allegados y la clase trabajadora.
Con esta nueva muerte obrera son al menos 24 las trabajadoras y trabajadores muertos en Euskal Herria, al menos 5 de ellos en Nafarroa.
Consideramos intolerable este tipo de accidentes. Los factores se repiten, subcontratación y caída en altura en construcción y solicitamos que se investigue el accidente, se analicen las causas inmediatas y básicas que desencadenaron el accidente, se pongan las medidas preventivas oportunas para que no vuelva a suceder y se depuren responsabilidades en torno al mismo.
Como siempre hemos denunciado sindicalmente, todas las pérdidas de salud tienen su origen principal en las condiciones de trabajo, es la precariedad, la subcontratación en cadena, la temporalidad, etc. las que se sitúan en la base de la pirámide de accidentes y enfermedades. Y esto es más claro cuando en estas obras se incumple sistemáticamente la aplicación del convenio sectorial de referencia.
Lo que está claro es que éste o cualquier accidente laboral no son hechos aislados, son el reflejo de un modelo productivo en el que prima mas la economía que la salud y la vida de la clase trabajadora. Es por ello que podemos decir que el cambio no está en Gasteiz, Iruñea o Baiona, no está en Madrid o París, no nos lo van a regalar la patronal o las leyes. El cambio está en cada uno de nosotros y nosotras, está en nuestro compromiso, en cada centro de trabajo, en cada pueblo y cada barrio.
Desde el Sindicato LAB, tenemos claro que la movilización y la lucha son las únicas armas que tenemos para acabar con esta lacra individual, familiar y social que son los accidentes de trabajo, porque necesitamos un cambio de rumbo, un cambio de modelo, en donde la salud y la vida de la clase trabajadora sea el elemento principal.