LAB y ELA denuncian la situación que vienen atravesando hace ya tiempo la plantilla de la empresa de Erandio Cables y Alambres Especiales S.A.
La falta de inversion suficiente hace que tengan que desarrollar su trabajo en condiciones absolutamente precarias, el lamentable estado de las instalaciones y las máquinas está afectando de manera directa a la salud y la vida de las y los trabajadores. En lo que va de año los accidentes laborales ascienden a 25 y eso sin olvidar el trabajador que murió en accidente laboral el pasado mes de septiembre. A esto hay que añadir los continuos retrasos en las nóminas desde finales del pasado año.
Esta empresa fue adquirida por el Grupo Vicinay en marzo de 2015, y con la compra anunciaron una inversion de 10 millones de euros, 40 nuevas contrataciones y un aumento del 70% en la producción en los 5 años siguientes a la compra.
Sin embargo, la inversion realizada a día de hoy, dista mucho de esa cifra y en cualquier caso no se corresponde con las necesidades más urgentes. Las contrataciones se vienen realizando vía ETT y se pretende ese aumento en la produccion con unas máquinas obsoletas y una plantilla insuficiente. En este sentido, la plantilla continúa con su apuesta firme por el proyecto industrial realizando enormes esfuerzos, a pesar de las malas condiciones de seguridad, por alcanzar los niveles de produccion que les imponen, lo cual no les garantiza ni siquiera el abono del salario en tiempo.
La operación de adquisición de Cables y Alambres Especiales S.A se realizó a través de un acuerdo logrado por parte del Grupo Vicinay con la Diputación Foral de Bizkaia, el Gobierno Vasco y los accionistas de la empresa.
LAB y ELA entendemos que Gobierno Vasco y Diputación están actuando como meros espectadores, haciendo dejacion de sus responsabilidades. No es suficiente con promover acuerdos y sacarse fotos, es necesario un posterior seguimiento para garantizar que esos acuerdos se cumplen.
Si esto no fuera suficiente, el avance del PGOU de Erandio dibuja un frente de la ría sin la presencia de la fábrica, proponiendo en su lugar una zona residencial. Ante el peligro que supone una recalificación del terreno de industrial a urbano sin exigir compromisos al Grupo Vicinay, el Comité de empresa ha iniciado conversaciones con el Ayuntamiento de Erandio y el resto de grupos políticos municipales, además de haber solicitado ya una reunión con el Grupo Vicinay y Gobierno V asco.
En esta situación, es absolutamente necesario lograr acuerdos y compromisos firmes con todas las partes implicadas, para conseguir una apuesta real por el proyecto industrial, el mantenimiento del empleo de sus más de 130 trabajadores y trabajadoras y unas condiciones dignas de seguridad en el trabajo.