Las y los conductores de autobuses de transporte público de LAB están realizando una campaña en torno a los badenes, reivindicando que hay alternativas a los daños a la salud que les conllevan éstos. Hoy se han movilizado ante las Inspecciones de Trabajo de Donostia y Bilbo con el lema “Limitad la velocidad pero no ha costa de nuestras espaldas”. La próxima semana lo harán en Gasteiz e Iruñea, ante Osalan y el Instituto de Salud Pública y Laboral de Nafarroa, respectivamente.
Desde hace muchos años, los ayuntamientos y los organismos encargados de la gestión dede carreteras han adoptado como moda la colocación en las calles y demás vías de circulación numerosos badenes con gran desnivel con la intención de reducir la velocidad de los vehículos y que ya han provocado algunos accidentes a los conductores y conductoras de los transportes públicos.
Y es que, a excepción de los demás conductores y conductoras que sólo hacen el viaje del momento, nosotros y nosotras estamos condenados a pasar una y otra vez por el mismo recorrido, con la repetición de golpes en la espalda que esto supone.
Por si ésto fuera poco, aunque existe una normativa referente a los badenes (medidas, nivel de la pendiente, etc.) muchas veces es incumplida o el estado de los mismos está deteriorado. Además, muchos autobuses tienen unos sistemas de amortiguación y de suspensión en lamentable estado.
Las y los conductores de los autobuses de transporte público de LAB creemos que hay alternativas en las que nuestras espaldas, nuestros hombros y/o nuestros cuellos no salgan perdiendo: badenes inteligentes que cambian su altura en función de la velocidad del vehículo que se aproxima, radares, el llamado “cojín berlinés”,…
La concentración de hoy debemos situarla pues en la dinámica que estamos llevando a cabo para conseguir esa solución. Además de haber pedido información y responsabilidades en torno a los badenes a nuestras propias enpresas (prevención), estamos haciendo lo propio con EUDEL, Osalan/ Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra e Inspección de Trabajo porque vemos que debemos conseguir un consenso en el que nuestra salud no sea la que sufra daños por medidas adoptadas en teoría para que unos no corran en las vías.