El sindicato LAB ha hecho público el análisis de coyuntura aprobado por su Asamblea Nacional esta semana. En dicho análisis, LAB constata los síntomas de involución política y social a ambos lados de los Pirineos.
LAB señala el deterioro del Régimen del 78, que apunta a una agenda autoritaria frente a las demandas democratizadoras de naciones como Catalunya y Euskal Herria o movimientos como el feminista. Respecto al Estado francés, el diverso movimiento de los “chalecos amarillos” han dejado patentes las desigualdades y retrocesos percibidos por gran parte de la población.
Frente a las agendas de ambos Estados, LAB considera que se está consolidando una agenda en clave de soberanía y cambio social en Euskal Herria. La tenacidad del movimiento de pensionistas de Hego Euskal Herria, que sigue en la calle con su agenda movilizadora, así como la dicisión del movimiento feminista de convocar Huelga Feminista el 8 de marzo, denotan que las movilizaciones del curso pasado no son un fenómeno pasajero. Los sectores que más sufren la precarización de la vida se están activando, también en el ámbito laboral, con luchas ejemplares como la de Huerta de Peralta, protagonizadas por personas migrantes, o las numerosas luchas protagonizadas por sectores feminizados: Residencias de Gipuzkoa, Ayuda a Domicilio en Bizkaia y Donostia, diferentes ámbitos de la Limpieza, la Enseñanza concertada, empresas como Simply, Dia o Loramendi…
No obstante, el debate presupuestario ha mostrado las resistencias del PNV para revertir los recortes, cambiar la orientación de las políticas públicas y dar una respuesta positiva a los sectores mencionados.
Hablando de agenda propia, el acuerdo alcanzado en la Comisión de Autogobierno de la CAV plantea para las tres provincias un nuevo estatus político que posibilite la creación de un Marco Vasco de Relaciones Laborales y Protección Social. El sindicalismo vasco debe movilizarse para asegurar, en primer lugar, una mayor concreción de los contenidos sociolaborales, y en segundo lugar, abrir un escenario de confrontación democrática frente a un Estado que sin duda va a vetar cualquier propuesta que suponga el reconocimiento de un sujeto político soberano en Euskal Herria o Catalunya. En vez de generar expectativas sobre lo que se pueda decidir en Madrid, es el momento de decidir en Euskal Herria. En vez de fiar el final de la estatalización de la negocación colectiva al Congreso español, se trata de activar a la clase trabajadora vasca por un marco de relaciones laborales propio que posibilite medidas como los 1.200 euros de salario mínimo, la pensión mínima de 1.080 euros o el fin de la brecha salarial.
En este contexto, la Asamblea Nacional de LAB ha aprobado las líneas de intervención para los próximos seis meses, que se resumen en las siguientes:
• Organizar luchas sindicales a nivel de sector y de empresa, a la vez que se unen fuerzas en torno a una tabla reivindicativa general contra la precariedad: 1.) Salario mínimo de 1.200 euros y jornada laboral semanal de 35 horas para todos y todas 2.) Acabar con todas las discriminaciones e impulsar medidas de igualdad, conciliación y corresponsabilidad; 3.) Eliminar cualquier modelo de precarización como la subcontratación, falsos autónomos, personas becarias; 4.) Derecho para volver con vida y sanas y sanos a casa; 5.) Derecho a decidir aquí, sin estatalización.
• Impulsar la Huelga Feminista en los centros de trabajo, proyectando las luchas y reivindicaciones de las mujeres trabajadoras.
• Unir la lucha en favor de pensiones dignas con la lucha en favor de empleo y salarios dignos, dando pasos para que la lucha de las y los pensionistas sea una lucha de toda la clase trabajadora.
• Incidir en el debate político general, reivindicando un nuevo estatus que posibilite un marco de relaciones laborales y protección social propio. El 19 de febrero de 2019 será el 25 aniversario de la reivindicación histórica que realizamos desde el sindicalismo soberanista en favor del Marco Vasco de Relaciones Laborales. Será un aniversario muy señalado.
• Aportar desde el sindicalismo propuestas para la elaboración y desarrollo de un proyecto socioeconómico propio en Euskal Herria.
• Hacer frente al modelo capitalista, patriarcal y racista representado por el G7, a celebrar el próximo agosto en Miarritze.
• Consecuencias del conflicto. La lucha para traer a las y los presos políticos y exiliados vascos a casa es un eje prioritario. Profundizaremos en los centros de trabajo y en la calle en la activación de esa lucha.