La coalición de Gobierno del Estado ha estado meses hablando de la derogación de la reforma laboral, pero hoy ha quedado claro que el 95% de los contenidos de la reforma impuesta por el PP se mantendrán en vigor.
Se ha perdido la oportunidad de poner fin a la grave situación que viene padeciendo la clase trabajadora en los últimos diez años: seguir adelante con los despidos será fácil y barato; las empresas mantendrán la posibilidad de imponer movilidad y flexibilidad; seguirán centralizando y estatalizando nuestra negociación colectiva y las empresas mantendrán la posibilidad de incumplir lo acordado en los convenios. Con la ratificación en el Congreso de lo acordado en la mesa de diálogo social de Madrid, se justifican las medidas más regresivas que impuso el PP en 2012.
Por si fuera poco, las medidas acordadas para hacer frente a la temporalidad son absolutamente insuficientes, se seguirá permitiendo el fraude como hasta ahora y se mantendrá la inestabilidad de las y los trabajadores.
El acuerdo de la mesa de diálogo social y su ratificación hoy en el Congreso es un fraude; se garantizará a la patronal tener a su alcance todas las herramientas para seguir imponiendo la precariedad. Esa es la razón por la que la patronal está tan contenta.
En relación al debate sobre la reforma laboral, teníamos claro que con la correlación de fuerzas que hay en Madrid era muy difícil su derogación. Desde LAB, siempre hemos dicho que teníamos la mirada puesta en Madrid, pero con la vocación de hacer posible aquí, en Euskal Herria, aquello que no es posible allí. Ese momento ha llegado. En Madrid no hay nada que hacer. Sindicatos y partidos de izquierda han ratificado la reforma regresiva llevada a cabo por la derecha.
Es hora de impulsar cambios en Euskal Herria, cambios que nos blinden de la reforma laboral. Ese será el objetivo de LAB. Para ello, aquí utilizaremos instrumentos que, a nivel estatal, los sindicatos CCOO y UGT rechazan: la confrontación, la lucha y la huelga.
Si hay despidos, responderemos con la lucha. Fomentaremos luchas, todas las que sean necesarias, para negociar aquí nuestros convenios laborales, sin injerencias externas; y lucharemos también por alcanzar convenios y acuerdos laborales que hagan frente a la reforma laboral.
Hagamos posible en Euskal Herria una normativa laboral que dé solución a la situación de la clase trabajadora vasca.
¡No a esta reforma laboral!