Hemos tenido hoy conocimiento de la sentencia por el juicio contra David González y Alexis Rodríguez. Lejos de las condenas solicitadas por el empresario y por el fiscal, el juez les ha condenado a pagar una multa de 90 euros. Estos dos trabajadores no irán a la cárcel gracias a la movilización social, pero, aún así, las y los antiguos trabajadores de Talleres Mecánicos Arakistain (TMA) y LAB queremos denunciar que, en lugar de la absolución, se ha emitido una sentencia en contra de los trabajadores, aunque ésta sea irrisoria.
La sentencia está ligada al conflicto laboral por el cierre de TMA. La empresa denunció a varios trabajadores por la huelga y la lucha llevada a cabo para defender el empleo y sus salarios. El empresario solicitó para dos de ellos, Alexis Rodríguez y David González, una pena de 5 años y 6 meses de cárcel y una multa de 69.000 euros a modo de indemnización; el fiscal, por su parte, pidió 2 años y 3 meses de cárcel para cada uno.
Las movilizaciones y la lucha han dado sus frutos, puesto que el juez ha impuesto una falta leve a los dos antiguos trabajadores, lejos de las penas de cárcel solicitadas. De todos modos, hacemos una valoración agridulce. Está claro que es muy satisfactorio haber evitado la pena de cárcel para ellos, pero queremos dejar claro que detrás de esta sentencia está el afán de criminalizar la acción sindical. En opinión de LAB, han querido poner límites a la lucha obrera. En su momento pedimos la absolución para los dos, y hoy también creemos que la sentencia debería de haber obrado en esa dirección.
Esta es la nota emitida por los antiguos trabajadores de TMA, al hilo de la sentencia:
lexis Rodríguez y David González fueron juzgados el pasado 29 de noviembre por la dinámica de lucha que emprendieron hace tres años en favor de los puestos de trabajo y los salarios de las y los trabajadores de Talleres Mecánicos Arakistain (TMA) de Etxebarria. El empresario pidió para ellos 5 años y 6 meses de cárcel y una multa de 69.000 euros, mientras que el fiscal solicitó 2 años y 3 meses de cárcel.
Hoy se ha conocido la sentencia, en la que el juez les condena a pagar una multa de 90 euros. Lo que debería ser absolución, se ha convertido en una condena anunciada. ¿Por qué?
El juez ha querido criminalizar la lucha obrera, ha querido poner límites a la acción sindical. Se trata de una causa jurídica insostenible, en la que no han podido demostrar delito alguno, por lo que han recurrido a la excusa de la falta para castigar a los trabajadores con una condena irrisoria.
La acción sindical es una herramienta imprescindible para las y los trabajadores en la defensa de nuestros derechos, y es eso precisamente lo que han condenado.
La lucha es el único camino: Gora langileon borroka!