El acceso a una vivienda digna, lejos de ser una problemática exclusivamente juvenil, es una realidad para cada vez más sectores de trabajadoras y trabajadores, debido a la generalización de situaciones de empobrecimiento y precarización.
LAB defiende de forma firme el alquiler público y social, además de reivindicar la necesidad de limitar y bajar el precio tanto de alquileres como de préstamos. LAB considera que son medidas prioritarias para garantizar el derecho a la vivienda y situar este en el camino de su desmercantilización. El solo hecho de construir más vivienda, más que una solución, es un elemento que la patronal quiere utilizar para alimentar las ansias de negocio de especuladores, inmobiliarias y grandes propietarios; y llevar a trabajadores y trabajadoras a endeudarse con los bancos para reducir así los conflictos laborales.
Por eso denunciamos que las palabras del director general de ADEGI José Miguel Ayerza defienden los intereses de quienes hacen negocio con el mercado inmobiliario y pretenden garantizar los beneficios de fondos buitre, inmobiliarias y grandes propietarios.
También esta vez, la patronal volverá a tener a LAB enfrente. Al contrario de lo afirmado por la asociación empresarial de Gipuzkoa, las y los trabajadores tenemos un problema real con los salarios y las condiciones laborales y este está estrechamente vinculado a las dificultades de tener una vivienda digna. Mientras en Gipuzkoa los precios de la vivienda se han multiplicado, se están incrementando las rentas del capital y reduciendo las del trabajo. Son caras de una misma moenda, y ADEGI quiere desviar su responsabilidad.
Para terminar, en estos momentos en los que el debate sobre la fiscalidad está abierto en Gipuzkoa, LAB presentará una propuesta para una profunda reforma fiscal.