El covid-19 ha dejado en evidencia, por si alguien todavía lo dudaba, la necesidad de un nuevo modelo para el cuidado de las personas mayores. La Diputación de Bizkaia impone un modelo que mercantiliza su cuidado. El fin de este modelo es ganar cuanto más dinero mejor, y esto es incompatible con un servicio y unas condiciones laborales dignas.
Hacemos responsables a Rementería y Murillo de las gravísimas consecuencias que el modelo actual ha supuesto a las personas cuidadas, a sus familiares y a las trabajadoras. Nunca vamos a olvidar que algunas de estas consecuencias son irreparables (el 40% de las muertes por covid se han dado en residencias).
La necesidad de un nuevo modelo es urgente y es un debate que la sociedad tiene que afrontar. Nosotras nos comprometemos a trabajar para situar este debate en la agenda social y haremos nuestra aportación en la línea de un nuevo modelo público, gratuito y comunitario.
A día de hoy, la patronal y la Diputación se niegan a negociar el convenio de Bizkaia. Se niegan a hablar con las trabajadoras y bloquean la mesa negociadora alegando que no es momento de negociar.
LAB tiene claro que es ahora el momento de afrontar los graves déficit que maltratan a este sector. Es el momento de dar pasos reales que dignifiquen los cuidados de las personas mayores y en consecuencia las condiciones laborales de las trabajadoras. Si no es ahora el momento, después de lo ocurrido este año y medio, ¿cuándo va a ser?
Para LAB es imprescindible afrontar en esta negociación un proceso de publificación y sacar el cuidado de nuestros mayores de la lógica de los beneficios empresariales. Nos comprometemos a ser flexibles en este proceso, pero deberá ser un proceso que dignifique los cuidados y no deje en el camino a las trabajadoras actuales del sector. Nos comprometemos a hacer nuestra aportación en este sentido.
En el camino de este proceso exigimos a la patronal y a la Diputación pasos reales:
– Equiparación de condiciones laborales con las trabajadoras de la Administración pública que realizan nuestro mismo trabajo. A igual trabajo mismas condiciones laborares. En estos momentos, según las distintas categorías, estamos alrededor del %50 de esa equiparación con las trabajadoras de Diputación. Esta equiparación frenaría la privatización y el mercadeo actual.
– Unas ratios más humanas. No es posible dignificar nuestro trabajo ni los cuidados de las personas mayores con las actuales cargas de trabajo. Las personas mayores se merecen más atención directa y las trabajadoras unos ritmos de trabajo que no pongan en riesgo nuestra salud. Son imprescindibles unas ratios diferentes si queremos hablar de un servicio digno.
En un contexto donde patronal y Diputación ni siquiera cumplen el convenio actual y donde ni quieren hablar de las reivindicaciones de las trabajadoras, LAB quiere trasladar a las trabajadoras y a la sociedad en general, nuestra determinación para luchar por lo que consideramos nuestro.
Porque todos y todas lo merecemos.