En el día de hoy la mayoría sindical vasca ha salido a la calle junto con el Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria con el objetivo de aunar fuerzas y reivindicaciones. Nos une la lucha por unas pensiones dignas y suficientes y por un salario mínimo que podamos decidir aquí.
Reivindicamos la negociación de un salario mínimo para EAE y Nafarroa. En ese sentido, debemos denunciar el papel antidemocrático que han jugado las patronales CEN y Confebask, que ni siquiera han mostrado su disposición a sentarse en una mesa para hablar de este tema. Son plenamente conscientes de que el salario mínimo del Estado Español es insuficiente para llevar a cabo un proyecto de vida en Euskal Herria. Alegan la competitividad de las empresas para no querer subirlo. Sin embargo, las grandes empresas, como las energéticas o la banca no dejan de aumentar sus beneficios. La propuesta de la mayoría sindical vasca beneficiaría a miles de personas trabajadoras, sobre todo de los sectores más precarizados (sectores feminizados, racializados, diversidad funcional, personas jóvenes, etc).
Esta lucha se enlaza con la lucha por unas pensiones suficientes, ya que sin salarios dignos no hay pensiones dignas. Miles de pensionistas reciben pensiones por debajo del salario mínimo, sobre todo las mujeres pensionistas ya que hay una brecha en pensiones de alrededor del 40%. Por ello, apoyamos activamente la ILP llevada a cabo por el MPEH, que ha suscitado el apoyo de un gran apoyo social a través de las firmas recogidas.
En los próximos meses, la mayoría sindical vasca también llevará a cabo una ILP en la CAV a favor de conseguir la competencia para decidir aquí nuestro propio salario mínimo. En Nafarroa la ILP no ha sido admitida a trámite, sin embargo, recogeremos firmas igualmente entre la clase trabajadora para demostrar que nuestra reivindicación tiene el apoyo social suficiente. Así mismo, en Nafarroa, la mayoría sindical se movilizará el 14 de abril desde la CEN hasta el Parlamento de Nafarroa para denunciar la actitud regresiva con que se ha tratado a la clase trabajadora.
Seguiremos movilizándonos por un reparto justo de la riqueza y a favor de un salario y unas pensiones mínimas acorde a nuestra realidad. Aquí vivimos, trabajamos y decidimos.













