Este viernes el sindicato LAB ha presentado en el consejo general de Osalan un plan para integrar el riesgo de violencia machista en el sistema de prevención de las empresas. En este sentido, tanto en el plan de prevención como en la evaluación de riesgos, se pide que se identifique de forma concreta este riesgo que sufren las mujeres en el trabajo y que se apliquen medidas preventivas, empezando por la formación. A continuación, si estas medidas fracasaran, se llevaría a cabo la aplicación de los protocolos contra la violencia machista. Para redondear la lógica preventiva, las y los médicos de vigilancia de la salud propondrían diferentes preguntas concretas a las mujeres para poder identificar indicios de violencia machista. Si los hubiera, las y los médicos de vigilancia de la salud lo comunicarían a Osalan para evitar la revictimización de la víctima sin dejar la cuestión en manos de la empresa. Estas medidas requieren también la formación específica del técnico de Osalan y de la inspección de trabajo.
En síntesis, dado que la integración del apartado técnico es competencia de la inspección de trabajo, es a ella a quien se le encomienda la ejecución de la propuesta en las empresas. A continuación, dado que la vigilancia de la salud es competencia de Osalan, se solicita a este ente que ejecute su implementación en las empresas.
Accidentabilidad
El 2024 también está siendo un año duro en lo que a accidentes laborales se refiere en Euskal Herria. Es evidente que las políticas de salud laboral implementadas durante años por el Gobierno Vasco están siendo estériles e insignificantes, todos los planes han fracasado; los datos y las muertes así lo confirman. Los datos oficiales anticipan un aumento del 6,6% de los accidentes con baja respecto al año anterior, hasta noviembre. LAB quiere recordar que en 2024 ya han fallecido 61 trabajadores en accidentes laborales y que la realidad de las enfermedades profesionales se oculta por parte de las Mutuas empresariales.
LAB ha pedido que el Gobierno Vasco desarrolle la capacidad de inspección completa y que aumente el número de inspectores e inspectoras al menos igualando los estándares europeos. Las empresas han demostrado en las últimas 3 décadas que no cumplen de forma voluntaria la normativa de salud laboral, lo deberán hacer por obligación.
Actas
Para LAB el regreso a Osalan no está siendo fácil, las actas de las reuniones no recogen lo debatido en ellas. Existe una tendencia a ocultar discusiones y divergencias para expresar así el «clima de consenso» no real del consejo. Tras varias reclamaciones y dado que las actas siguen el mismo camino, LAB no aceptará en el futuro este sistema y reclama la transcripción de las reuniones como se hace en otras instituciones para evitar este tipo de problemas.