Hemos tenido conocimiento de que el trabajador, de 44 años, que había sufrido una caida el pasado 10 de septiembre en Ituren, ha fallecido como consecuencia de las graves heridas sufridas. Desde LAB, queremos transmitir nuestro pesar y mostrar nuestra solidaridad a familiares y allegadas y allegados.
El trabajador autónomo, que estaba colocando un toldo en la pared de una casa de Ituren, se ha caído desde una escalera de mano que doblaba la altura permitida. Una y otra vez hemos puesto sobre la mesa que estos accidentes son evitables, que los dramas personales y sociales que se dan detrás de estos siniestros se pueden evitar si se cumplen las medidas de prevención.
57 trabajadoras y trabajadores han fallecido en Euskal Herria en 2022, 14 en Nafarroa; 8 en caidas de altura. Es evidente que, mientras no se tomen medidas reales, no cesará el derramamiento de sangre. En este caso, además, siendo el trabajador autónomo, la normativa de salud laboral no le ampara. ¿Cómo es posible que las y los autónomos no tengan esa protección? ¿Qué hace que un trabajador tenga que asumir riesgos innecesarios aún siendo consciente de ello?
De este modo, hacemos un llamamiento al Gobierno de Nafarroa para que adopte las medidas necesarias para proteger también a las y los autónomos, para que incluya a estas y estos trabajadores en los protocolos de salud laboral. No se puede dejar de proteger a las y los autónomos. Para garantizar la salud laboral, ¡que se tomen las medidas de una vez!