En el periodo de consultas del Expediente de Regulación de Empleo de Dynamobel, UGT se ha limitado a hablar por y para la empresa y la defensa del empleo ha brillado por su ausencia.
Ayer, tras una reunión de 12 horas, acabó el periodo de consultas del ERE de Dynamobel. Esas doce horas sirvieron para que se aceptará calderilla y para que, en consecuencia, CCOO se uniera a UGT en la firma del acuerdo. En la práctica se han destruido 70 puestos de trabajo, se ha cerrado una planta en su totalidad y se han precarizado las condiciones de trabajo de la plantilla que, de momento, se mantiene trabajando en la empresa.
Una situación muy preocupante y totalmente denunciable si tenemos en cuenta que el verdadero problema de la viabilidad de la empresa, el sobredimensionamiento de la mano de obra indirecta con puestos concedidos a dedo entre familiares y amigos de la dirección, continúa en los mismos términos y que se sigue metiendo dinero público (fondos europeos, prorrogas de la seguridad social…) a un pozo sin fondo con un plan de viabilidad que de viable tiene más bien poco.
Sin bien no esperábamos nada por parte de la empresa, durante este proceso ha sido bochornoso, por parte de ciertas representaciones sindicales, la total asunción de la destrucción de empleo como algo inevitable y la negociación de migajas para “mejorar” la brutal bajada salarial que se plantea.
Cada cual deberá hacer examen de conciencia en función de qué intereses ha estado defendiendo estas semanas, pero desde LAB tenemos claro que durante todo el proceso lo único que ha imperado ha sido el derrotismo y la asunción de los argumentos de la empresa sin ningún tipo de planteamiento serio de lucha, y sin lucha difícilmente se pueden defender los puestos y los derechos de una plantilla.