Comunicado del comité de empresa de UDAPA:
El pasado viernes 11 de diciembre de 2020, se registró un accidente laboral grave en las instalaciones de la empresa UDAPA S. Coop., dedicada a la producción y comercialización de patata. En concreto, en torno a las 5:30 de la mañana, un compañero que se disponía a comenzar su jornada laboral cayó a una zanja correspondiente a los trabajos de excavación que se están realizando. A consecuencia del accidente, el trabajador tuvo que ser trasladado al hospital a consecuencia de las heridas y lesiones producidas. En estos momentos se encuentra en planta.
Tenemos claro que los accidentes laborales no son fruto de la mala suerte o la casualidad, sino resultado de las relaciones laborales, la precariedad y la regulación laboral.
Unos días antes del accidente, uno de los delegados de prevención ya advirtió a los responsables de la empresa de la falta de seguridad con la que se están desarrollando los trabajos de excavación, y comunicó los riesgos a los que se exponía la plantilla, entre ellos el riesgo de caídas por aberturas. Pero la empresa no atendió a los requerimientos de los representantes de la plantilla.
Los trabajadores y trabajadoras de UDAPA lo tenemos claro: necesitamos vidas y empleos dignos. Tenemos derecho a volver de nuestros trabajos sanas y con vida. Éste o cualquier otro accidente laboral no son hechos aislados, son el reflejo de un modelo productivo en el que prima más la economía que la salud y la vida de la clase trabajadora.
Los accidentes de trabajo son inadmisibles. Hoy en día existen suficientes recursos, tanto personales como técnicos, para evitar los accidentes, pero conllevan un costo económico, y las empresas y las patronales no quieren invertir en prevención. Siempre priorizan la productividad y el beneficio económico a corto plazo por encima de la seguridad y la salud de los trabajadores y trabajadoras.
Queremos denunciar que los datos de siniestralidad laboral son peores de un año a otro, y por parte de los gobiernos no vemos cambios significativos. A los gobiernos les exigimos que garanticen la seguridad y den prioridad a la salud de las personas trabajadoras. Hay que garantizar medidas e instrumentos efectivos en los centros de trabajo, y no pueden recaer únicamente sobre las empresas el cumplimiento de las mismas. Las administraciones públicas, deben aumentar el control y seguimiento sobre las empresas.
Tenemos claro que la movilización y la lucha son las únicas armas que tenemos para acabar con esta lacra, individual, familiar y social que son los accidentes de trabajo. Necesitamos un cambio de rumbo, un cambio de modelo, en donde la salud y la vida de la clase trabajadora sea el elemento principal. Por ello, desde el Comité de Empresa de UDAPA solicitamos una investigación de lo ocurrido, y al mismo tiempo hacemos un llamamiento a las trabajadoras y trabajadores a sumarse a la lucha por unas condiciones de trabajo dignas. Mañana martes, 15 de diciembre, realizaremos una concentración en las puertas de la empresa a las 14:00 horas.