En opinión de LAB, queda en evidencia la falta de voluntad política del Gobierno de Navarra para gobernar en favor de la mayoría social resolviendo las necesidades de la clase trabajadora navarra que demandan un trabajo, pensión y vida dignas. A convocatoria de la Carta de Derechos Sociales de Euskal Herria, participaremos mañana en la concentración prevista frente al Parlamento de Navarra, a las 10:00, en favor de unos presupuestos dignos y sociales.
En diciembre de 2019 el Gobierno de Navarra nos presentaba en el Consejo Económico y Social el anteproyecto de presupuestos de Navarra para el año 2020. Un anteproyecto de presupuestos que en nuestra opinión no respondía a las necesidades e intereses de la mayoría social navarra.
Nuestra intervención fue clara y contundente, exigimos al Gobierno de Navarra unos presupuestos en favor de un trabajo, pensión y vida dignas.
Sin embargo, una vez más, el Gobierno de Navarra formado por el PSN, Geroa Bai y Podemos hace caso omiso de las reivindicaciones que conectan con las necesidades de la mayoría social. ¿Qué tiene la patronal CEN para que sus reclamaciones sean tenidas en cuenta y no así las de los sindicatos? Con este actuar el Gobierno nos trata directamente como a tontos, gobernando para los empresarios frente a la mayoría de navarras.
La carga fiscal en Nafarroa es de las más bajas de la Unión Europea (30,4% del PIB frente al 39% de la UE) y el sobresfuerzo fiscal lo soporta la clase trabajadora (las rentas del trabajo suponen el 35% de la recaudación total frente al 5,5% del Impuesto de Sociedades).
La eliminación del impuesto sobre el patrimonio empresarial es un claro ejemplo del tipo de política fiscal que defiende el actual Gobierno de Navarra. Fiscalidad a la medida de los empresarios y peligrosas vías de escape para que las grandes fortunas eludan el pago de impuestos. Bajo el falso señuelo de una fiscalidad atractiva y competitiva no hay otro objetivo que reducir lo público a su mínima expresión posible y dejar el funcionamiento de la economía íntegramente en manos del mercado y la lógica del capital privado.
Presupuestos que no plantean alternativa al triple cerco capitalista.
El límite de déficit, el objetivo de deuda y la regla de gasto representan el triple cerco impuesto por el capitalismo para blindar la austeridad presupuestaria. En opinión del sindicato LAB es fundamental construir alternativas frente a este austericidio y creemos que existe vía para ello, por un lado defender otra fiscalidad. Que se traduzca en un equilibrio justo de los esfuerzos fiscales que realizan las rentas del trabajo, del capital y los beneficios empresariales. Por otro, reivindicar la soberanía de Navarra para tener las competencias y poder decidir todas las medidas que mejoren nuestras condiciones de vida y de trabajo.
Los presupuestos para 2020 no garantizan el trabajo, pensión y vida dignas que demanda la mayoría social.
Complementar por ley la pensión mínima hasta los 1.080 euros, empleo público de calidad, Renta Garantizada y derecho a la vivienda en los términos recogidos en la Iniciativa Legislativa Popular presentada por la Carta de Derechos Sociales. En el ámbito laboral aprobar una ley que acabe con la brecha salarial, la discriminación y la violencia machista. Situar las inversiones en educación y sanidad en parámetros europeos así como el apoyo del gobierno a la reivindicación de un salario mínimo de 1.200 euros y una jornada laboral de 35 horas en Navarra son algunas de las propuestas realizadas por LAB en el marco del citado Consejo Económico y Social de acuerdo a la tabla de reivindicaciones acordada para la Huelga General entre movimientos sociales, sindicales y de pensionistas en la Carta de Derechos Sociales de Euskal Herria.
Ninguna de ellas han sido tenidas en cuenta quedando en evidencia la falta de voluntad política del Gobierno de Navarra para gobernar en favor de la mayoría social resolviendo las necesidades de la clase trabajadora navarra que demandan un trabajo, pensión y vida dignas.
Desde LAB nunca vamos a relativizar la fuerza y capacidad de nuestras luchas y reivindicaciones. Hace tan solo unos pocos años la reivindicación de un salario mínimo de 1.200 euros y una pensión mínima de 1.080 eran cuestiones proscritas ya que no formaban parte de la agenda del Régimen y las élites económicas. Introducir en un “Acuerdo Presupuestario” la referencia de un salario mínimo de 1.200 euros o un estudio sobre la pensión mínima de 1.080, y en esto también queremos ser claras, es algo meramente simbólico, sin plasmación práctica y por lo tanto insuficiente. No lo decimos nosotras, en la reunión celebrada con la presidenta Chivite constatamos su falta de voluntad real para implementarlas condenándonos al mileurismo de Madrid. Pero a su vez constata y evidencia la fuerza que han tomado nuestras nuestras reivindicaciones, las reivindicaciones por las que miles de personas salieron a la calle el día 30 de enero y que cuentan con un apoyo mayoritario.
Los hemos dicho en muchas ocasiones y esta no es una cosa de LAB, es imprescindible seguir luchando para que esas y las demás reivindicaciones de la Huelga se materialicen mediante Decretos y Leyes.