Diversas organizaciones políticas, sindicales y sociales rechazamos enérgicamente el intento de autogolpe de estado perpetrado por el presidente de El Salvador. Nayib Bukele militarizó la Asamblea y violentó el estado constitucional de derecho para forzar a este órgano legislativo a actuar y decidir según su voluntad.
En el pasado 9 de febrero en El Salvador el presidente Nayib Bukele convocó arbitraria y unilateralmente a la Asamblea Legislativa para obligar al órgano legislativo a la aprobación de un préstamo de 109 millones de dólares para la ejecución de la denominada 3a fase del Plan de Control Territorial contra la delincuencia. Ante la inasistencia del quorum necesario, Nayib Bukele se presentó en la Asamblea Legislativa con la fuerza militar y policial en un innegable intento de intimidación y presión a este poder del estado.
Frente a ello hacemos un llamado para que:
El presidente de la República, Nayib Bukele, respete las rutas constituidas a través de la seguridad y legalidad jurídica y mantenga la paz y el diálogo político, garantizando la independencia de poderes y la institucionalidad democrática del país.
Que en sus funciones, procure armonía social y canales de coordinación con la Asamblea Legislativa, respetando los principios que rigen la Constitución de El Salvador.
Al presidente de la Asamblea Legislativa, Mario Ponce, a priorizar en todo momento la seguridad jurídica y la paz al pueblo salvadoreño.
A la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia a ejercer el control constitucional que corresponde en estos casos y la exigencia de responsabilidades al Presidente del país ante este intento de autogolpe de estado y uso y abuso del órgano legislativo.
Hacemos un llamado desde la solidaridad internacional para que se respete el orden constitucional en El Salvador, se haga frente a la creciente militarización y se garantice la paz social y justa para el pueblo salvadoreño.