En septiembre de 2019 LAB denunció un caso de acoso sexual de una trabajadora de limpieza subcontratada en una empresa de Derio. Los hechos comenzaron a finales del 2016, cuando uno de los máximos responsables de la empresa comenzó a dirigirse a la trabajadora de limpieza para pedirle que le hiciera el café. Es en ese momento que entabla contacto con ella por primera vez cuando comienza una situación de abuso sexual continuado que se ha prolongado hasta la actualidad.
El alto cargo de la empresa escribe mensajes de forma reiterada vía whatsapp, fuera de horario laboral y de evidente calado sexual. La llama insistentemente, a veces hasta en cinco ocasiones seguidas y a altas horas de la noche. La observa y controla en la prestación de sus servicios, sugiriéndola que entre a su despacho. Fuerza encuentros en sitios aislados y confinados y llega incluso a seguirla hasta la estación de tren cuando ella abandonaba su puesto de trabajo.
Durante todo este tiempo la trabajadora no le denunció por miedo a sufrir represalias. Esta empresa ocupaba la mayor parte de su jornada laboral, era el centro en el que trabajaba el mayor número de horas. Temía consecuencias negativas por parte tanto de la empresa de limpieza, como del propio cliente, en el que el acosador era un cargo de suma importancia. Ha aguantado durante muchos meses una situación que le era hostil y humillante y que ha terminado haciéndola enfermar. Actualmente padece episodios repetidos de ansiedad intensa.
Queremos poner en valor la valentía de esta mujer trabajadora. Las situaciones de discriminación y violencia contra las mujeres en el entorno laboral se dan todo los días, pero es algo que no se dice ni se denuncia. A la falta de recursos insititucionales para velar por la integridad de la denunciante y a la desconfianza que suscita la actual justicia patriarcal, se suman otros elementos como son el miedo y la amenaza latente de perder el empleo.
Atreverse a denunciar no es fácil, por eso queremos subrayar su dignidad y coraje. Así mismo, desde el sindicato LAB anunciamos que perseguiremos la violencia machista en el entorno laboral por la vía jurídica, pero también a través de la acción sindical organizada, activaremos los mecanismos de solidaridad y cuidado mutuo para ser todavía más fuertes y responderemos con contundencia ante el más mínimo indicio de violencia que se pretenda ejercer contra las mujeres.
Queremos dar a conocer que la sentencia ha sido favorable para la trabajadora y que se reconoce el acoso por razón de sexo, reconociendo las pruebas de las conversaciones recogidas desde el año 2016 en la denuncia. Mediante esta sentencia, se ha procedido a la nulidad del despido y a abonarle una indemnizacion. Valoramos esta sentencia muy positivamente porque creemos que ya es hora que desde el ámbito juridicial se empiecen a reconocer estas agresiones que ocurren cotidianamente en el ámbito laboral en contra de las mujeres. También queremos poner en valor la importancia de denunciar estos casos. Por otro lado, remarcar también la valentia que tuvo esta trabajadora de dar el paso de denunciar y de ponerlo en conocimiento de LAB. Finalmente, queríamos hacer pública esta noticia para que otras mujeres trabajadoras que estén en este tipo de situaciones sepan que tienen la legitimidad absoluta y el apoyo total de LAB.