Hoy, 29 de noviembre, se ha aprobado el Presupuesto del Ayuntamiento de Bilbao para 2020. A juicio de LAB, el Presupuesto debería priorizar el desarrollo de unos servicios públicos de calidad que den respuesta a las necesidades de la ciudadanía, asegurando un reparto justo de la riqueza generada entre todos y todas. Por ello, las y los trabajadores del Ayuntamiento de Bilbao y de las subcontratas se han concentrado frente al Consistorio en defensa del desarrollo de los servicios públicos y en denuncia de la precarización impulsada por el Ayuntamiento a través de su política de contratación.
Un año más, el Presupuesto aprobado no es aceptable.
NO DA RESPUESTA:
-A los compromisos adquiridos con la plantilla municipal.
-Al Pacto de las Políticas Sociales aprobado en Pleno, porque no destina la dotación presupuestaria suficiente para la contratación del personal necesario para el desarrollo de dicho Pacto.
-Al Plan de Normalización del uso del Euskera, cuyo objetivo final es garantizar los derechos lingüísticos de la ciudadanía y de la plantilla municipal, porque no destina la dotación presupuestaria suficiente para la contratación del personal necesario para el desarrollo de dicho Plan.
-A la necesidad de la creación de un nuevo parque de bomberos y bomberas que sustituya al actual Parque de Deusto y que sirva para suplir las carencias del mismo. Este nuevo parque deberá asegurar unas condiciones laborales que garanticen la calidad del servicio y, además, deberá prever las necesidades futuras que generará la expansión de Zorrotzaurre.
-A las nuevas necesidades generadas por la creación y ampliación de barrios como Basurtu y Miribilla, donde no hay equipamientos culturales suficientes. Es imprescindible una reflexión sobre el servicio de bibliotecas determinando los criterios y las inversiones necesarias, atajando así las desigualdades entre barrios.
Además de todo lo anteriormente citado, el Ayuntamiento debe asumir su responsabilidad en la precarización del empleo. Hoy en día, en muchas contratas, el trabajo está precarizado, más aun en los sectores feminizados (jornadas parciales, temporalidad…), donde en algunos casos no se cumplen los aspectos más básicos del Estatuto de los Trabajadores como es el derecho al descanso. El Ayuntamiento debe vigilar y expedientar a las contratas que incumplen la normativa en materia laboral. Igualmente, en los pliegos de las contrataciones, tanto en las del Ayuntamiento como en las de las Empresas Municipales, hay que incluir las cláusulas necesarias para que las condiciones laborales de los y las trabajadoras no sean precarias:
-Sueldo mínimo de 1200
-Cumplir el convenio provincial
-Subrogación
-Premiar la cantidad de contratos indefinidos
-Premiar la cantidad de jornadas completas
-Incluir criterios de igualdad entre mujeres y hombres, como por ejemplo la brecha salarial
El Gobierno Municipal en ningún momento se plantea un compromiso claro contra la precarización del empleo que está generando cada vez más trabajadores y trabajadoras pobres.