El mes de enero el paro aumentó en 1.704 personas en Hego Euskal Herria, según los datos proporcionados por los servicios públicos de empleo. Sin embargo, la destrucción de empleo no ha tratado igual a hombres y mujeres.
El número de trabajadoras en paro ha aumentado en 2.754 con respecto al mes anterior, por el contrario hay 1.050 hombres menos en paro. En conjunto, la mala evolución del empleo en enero ha situado la cifra oficial de paro registrado en un total de 164.983 personas, y el 57% son mujeres.
Pero en realidad el volumen de empleo perdido durante el mes pasado es más elevado de lo que refleja la estadística de paro. Concretamente, la afiliación a la Seguridad Social se ha reducido en 10.831 personas, lo que nos da una imagen más precisa de la magnitud que ha tenido la caída del empleo.
El hecho de que el paro no haya aumentado en la misma medida lo único que indica es la disminución de la población activa, un hecho que permite edulcorar los datos de paro y, sin embargo, debería ser motivo de preocupación.
En lo que refiere a la contratación, el 93% de los contratos firmados fueron temporales, siguiendo así un patrón que se repite todos los meses sin que los poderes públicos tomen medidas eficaces contra la precariedad y su cronificación.
El escandaloso nivel que alcanza la contratación temporal sólo se explica por el uso abusivo y fraudulento de este tipo de contratos para cubrir necesidades de carácter permanente. Esta práctica se ha generalizado, tanto entre la clase empresarial como entre las administraciones públicas en su condición de empleadoras.
Por último, es obligado volver a denunciar que más del 70% de las personas consideradas en paro por los servicios públicos de empleo no están cubiertas por el sistema de protección por desempleo. Esto significa que 114.558 desempleadas no reciben ningún tipo de prestación por parte del Servicio Público de Empleo Estatal.