El día 11 de enero se firmo el convenio de hostelería para los años 2016-2017. Con la firma de este convenio, ELA, CCOO, UGT y la patronal han facilitado una vía a las empresas para reprecarizar las condiciones laborales de los trabajadores y las trabajadoras. Desde LAB denunciamos la actitud impositiva y de bloqueo mantenida por parte de la patronal en todo el periodo de la negociación, haciendo uso de la reforma laboral en su intento de recortar derechos a cambio de renovar la firma del convenio.
En LAB defendemos mantener la negociación de los convenios en el ámbito provincial, sin tener que renunciar por ello a mejorar las condiciones laborales y defender siempre los intereses de la clase trabajadora. Ésta es la posición que permanentemente hemos estado defendiendo en la mesa de negociación.
Por el contrario, la firma de este convenio va a generar mayor precariedad y miseria. ELA ha claudicado frente a una patronal crecida y cómoda gracias a CCOO y UGT que se han postulado en la negociación más afines a a respaldar y validar las propuestas patronales que a combatirlas.
Los contenidos que para LAB ha hecho inviable alcanzar un acuerdo son:
-Sistema Retributivo: Categoría Especial. Ahora las empresas disponen de esta modalidad para que las y los trabajadores, haciendo el mismo trabajo, cobren un salario menor durante un año. Esto supone que todas las contrataciones en hostelería a jornada completa se harán bajo esta categoría, a razón de 942,12 euros al mes durante el primer año de contrato, antes de poder optar a que se reconozca a cada trabajador o trabajadora su categoría real. Serán los propios trabajadores y trabajadoras quienes tendrán que acreditar tener experiencia en el sector de la hostelería y/o haber realizado cursos de formación vinculados a su puesto laboral con una duración mínima de 120 horas en su conjunto, para reducir el periodo del año a seis meses obligados de cumplir en cualquier caso con inferior salario por el mismo trabajo. Además, sin ninguna garantía de que una vez transcurridos los seis meses o el año, la o el trabajador no sea despedido antes de que reclame su categoría real.
Esta firma aleja a los trabajadores y las trabajadoras de la hostelería a acceder al salario mínimo de 1.200 euros que LAB reivindica para combatir la precariedad laboral. Esta reivindicación también es compartida por diversas plataformas sociales y por el sindicato ELA que con la firma de este convenio queda de nuevo a la vista sus propias contradicciones, facilitando la discriminación salarial y la precarización.
– Se deja vía abierta para que las empresas sigan externalizando los servicios. Esto es una práctica cada vez más habitual y especialmente en el caso de los hoteles. No se han puesto medidas para evitar que las empresas que se dediquen a subcontratar al personal estén obligadas a garantizar que a los trabajadores y las trabajadoras se les la aplique también el convenio de hostelería.
– Formación: Las empresas no estarán obligadas a realizarla.
Por eso, desde LAB os alertamos de que a pesar de que otros consideren la firma de este convenio como una victoria, aquí reflejamos lo que se esconde bajo el mismo. Por nuestra parte, seguiremos apostando para que mejore la realidad del sector en futuras negociaciones del convenio.