La asamblea de trabajadores de Formica el pasado lunes decidía aprobar un nuevo calendario de movilizaciones a propuesta unánime del comité de empresa, en el que se incluía el inicio de un encierro, desde la pasada noche, en las instalaciones de la empresa en Galdakao, con el fin de que la empresa retire el ERE presentado el 10 de septiembre.
En este mismo calendario se aprobaba a su vez el inicio de un paro indefinida y la realización de diversas movilizaciones, como la marcha a Madrid que se llevara acabo el próximo día 21 de septiembre, con el fin de realizar un encuentro con el representante del área mercantil de la embajada Neozelandesa, puesto que este país es uno de los accionistas del grupo Fletcher Building propietario de la empresa Formica.
Esta decisión se tomaba por parte de los trabajadores tras la reunión que mantuvieron por la mañana con los abogados que la empresa ha designado para llevar adelante el periodo de consultas. En esta reunión se reafirmaron en los mismas posturas que ya la semana pasada mostraron tanto a las administraciones como a los representantes de los trabajadores, una determinación por cerrar la planta que la empresa posee en Galdakao sin tratar de llegar a ningún tipo de acuerdo sobre ningún plan de viabilidad que garantizara la continuidad de la actividad económica de la misma.
Por otra parte hoy martes se ha convocado una concentración frente a la sede del gobierno vasco en Bilbao, Gran Vía 85 a las 10:00 de la mañana, hora a la que Inspección de Trabajo ha citado a las partes y en la que por parte del Comité se solicitara que se presente la documentación necesaria para poder estudiar el Expediente de Regulación y que no se de por iniciado el periodo de consultas hasta que no sea proporcionada, por el prejuicio que esto supone a la elaboración del contrainforme por parte de los representantes de los trabajadores.