Una vez más, los gobiernos imperialistas de occidente (Estados Unidos, Unión Europea) y de diversos países árabes (como, por ejemplo, Arabia Saudí), así como el Estado sionista israelí, han comenzado una guerra mediática que prepare el camino a una nueva intervención imperialista, basándose para ello en informaciones sesgadas, mentiras y medias verdades.
LAB denuncia esta campaña mediática, así como las intenciones imperialistas de los gobiernos arriba citados.
El futuro del Estado de Siria lo debe decidir sólo el pueblo sirio, sin ningún tipo de injerencia ni intervención extranjera. Igualmente, el Estado sirio debe garantizar los derechos políticos, sociales y económicos del pueblo kurdo, ya que casi 2 millones de kurdos habitan el norte del Estado sirio, e históricamente su derecho a la libre determinación y sus derechos políticos, culturales, lingüísticos y sociales han sido vulnerados, algo que LAB también denuncia. Hoy día la oposición kurda, al igual que una gran parte del pueblo sirio, en especial la minoría cristiana, sufre también la persecución y las ejecuciones sumarias que están llevando a cabo los mal llamados rebeldes sirios del ELS y del Frente Al Nusra, uno de cuyos objetivos fundamentales es establecer un régimen islamista integrista en un estado laico como Siria y en la citada parte del Kurdistán, con el apoyo de los regímenes absolutistas wahabíes del Golfo Pérsico, entre los que destaca Arabia Saudí, aliado histórico de los EEUU en la zona.
El pueblo sirio y el pueblo kurdo deben ser los únicos dueños de su futuro. No cabe volver a esquemas colonialistas del pasado. Un ataque contra Siria, sería el prolegómeno para después atacar a Irán y Líbano, y establecer regímenes títeres en todo Oriente Medio que defiendan los intereses imperialistas de EEUU, Israel y la UE. Ante esta situación, los Pueblos del mundo y la clase trabajadora no podemos permanecer impasibles. No caben falsas equidistancias.
Desde LAB hacemos un llamamiento a secundar las movilizaciones que se convoquen en denuncia de esta posible nueva agresión imperialista contra un pueblo soberano, y expresamos nuestra solidaridad a los pueblos sirio y kurdo y a su clase trabajadora.
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