El pasado 16 de septiembre de 2011, la Audiencia Nacional española hizo pública la sentencia por la que se condena a 5 de los procesados en el llamado “caso Bateragune”, en el que se enjuiciaba a líderes sindicales y políticos vascos que se han caracterizado por buscar una salida democrática y pacífica al conflicto político que se vive en Euskal Herria (País Vasco).
Entre los condenados se encuentra el ex-Secretario General de LAB, Rafael Díez Usabiaga, que ha sido condenado a 10 años de cárcel. El resto de las personas condenadas lo han sido a penas similares, entre 8 y 10 años de cárcel para cada uno. El 19 de septiembre de 2011, Rafa Díez fue encarcelado por segunda vez por esta misma causa.
Rafa Díez Usabiaga fue Secretario General de LAB durante casi 20 años hasta el 2008. Él y el resto de compañeros condenados fueron detenidos en octubre de 2009 en la sede de la central sindical vasca LAB.
Desde el Consejo Presidencial de la Federación Sindical Mundial, denunciamos el carácter político del juicio contra Rafa Díez. Ello demuestra las graves carencias democráticas del Estado español, ya que este tipo de juicios no se dan en ningún otro país de la Unión Europea.
El hecho de que un líder sindical esté encarcelado por su actividad política es algo inédito en la Unión Europea. La sociedad vasca hace tiempo que ha respondido de forma reiterada contra estas medidas de excepción y esta violación de Derechos civiles y políticos que se practican en el Estado español. Miles de personas han exigido reiteradas veces la puesta en libertad de Rafa Díez y sus compañeros. La mayoría sindical vasca también lo ha exigido de forma reiterada.
En un contexto en el que en el País Vasco hay un cese definitivo de la actividad armada de ETA, en el que personalidades mundiales y la mayoría de la sociedad vasca apuesta por una salida negociada al conflicto político que se vive, desde el Consejo Presidencial de la FSM manifestamos lo siguiente:
– Solicitamos, asimismo, a las autoridades del Estado español que se comprometan con el proceso de paz que está en marcha en el País Vasco, tomando todas las decisiones necesarias en esa dirección.
– Para ello, la legalización de la izquierda independentista vasca, el respeto de todos los derechos humanos, civiles y políticos y la implicación de todos los partidos políticos en un proceso de diálogo y negociación son necesarias.
En Johanesburgo, febrero de 2012