Durante el mes de noviembre va a continuar la tramitación en Madrid del Informe de Sostenibilidad Ambiental revisado después de múltiples alegaciones al Plan Director del Puerto Exterior de Pasaia. Seguimos asistiendo al mantenimiento de una apuesta tan absurda como cara y negativa desde muchos puntos de vista. Son ya muchos y cualificados agentes políticos, sindicales y sociales los que, como LAB, se han manifestado en contra del puerto exterior. Y el abanico es tan amplio, que hasta un significativo grupo de profesionales guipuzcoanos, algunos ligados incluso al puerto, han manifestado públicamente su indignación ante el proyecto.
Estos días estamos asistiendo a una nueva campaña mediática, claramente electoralista, a favor del puerto exterior. Por un lado, a través de los partidos PSOE, PNV, y PP en las Juntas Generales de Gipuzkoa (sin tener en cuenta que la fuerza mas votada en Gipuzkoa fue Bildu, contraria a su construcción y la más votada también en todos los ayuntamientos de Oarsoaldea, teórica beneficiada con el puerto exterior). Por otro, las contradictorias declaraciones del presidente del puerto Lucio Hernando, que reconoce que la pregunta principal de un debate nunca realizado es "si Gipuzkoa necesita o no un nuevo puerto"y al mismo tiempo dicta sentencia: " o se construye la dársena exterior o el puerto de Pasaia morirá indefectiblemente".
¿No serán ustedes los que están matando el puerto de Pasaia, imprescindible para la economía guipuzcoana desde su creación, haciendo desaparecer la actividad comercial y desafectando terrenos portuarios con el objetivo de "regenerar" la bahía inundándola de hormigón, sabiendo que con la que está cayendo nadie va a poner los 800 millones necesarios para destrozar Jaizkibel con su puerto-chicle?
¿Alguien se pregunta por qué desde el año 2004 están bajando los tráficos en Pasaia? ¿Alguien se pregunta por qué los mismos operadores que trabajan en el Puerto de Santurtzi con los mismos productos aumentan allí su actividad mientras que en Pasaia no para de bajar? ¿Alguien se pregunta por qué los puertos exteriores construidos en el Cantábrico cuestan el doble de lo inicialmente presupuestado como el de Coruña o Gijón al mismo tiempo que están infrautilizados? ¿Alguien tiene en cuenta que los muelles de Bilbao tienen capacidad para mover 90 millones de toneladas y que realmente no llega a 40 millones? ¿Alguien se ha fijado en que el último proyecto de puerto exterior en Pasaia tiene realmente 20 hectareas menos para la manipulación de mercancías que el actual, destinando a plantas de energía y almacén de hidrocarburos el mayor porcentaje de terreno? ¿Alguien tiene en cuenta que la mano de obra disminuye en los nuevos puertos por los avances tecnológicos?
Todos los que trabajamos aquí estamos viendo como la actividad portuaria decrece año tras año y lo único que crece es la preocupación sobre la viabilidad de la actual gestión. Durante los últimos ejercicios hemos asistido a una propaganda carísima pagada con dinero público de un proyecto que no tiene ninguna justificación económica ni ambiental, mientras el puerto sufre una continua crisis laboral y organizativa sin precedentes. Mientras la empresa se gasta cientos de miles de euros en publicidad del puerto exterior (en los estadios, en los equipos de deporte, televisión, prensa…), niegan la viabilidad del puerto actual. Mientras concentra recursos humanos y dinero en arrastrar a la población en su proyecto, se olvida de contratar un responsable de marketing o elaborar un plan de gestión ambiental, como tienen los demás puertos.
Ya es hora de ponernos todos los agentes portuarios a optimizar recursos, captar clientes y destinar los fondos públicos y las iniciativas privadas a mantener y atraer tráficos nuevos que garanticen el futuro del puerto y sus trabajadores. Y para esto hay que reorganizar los espacios portuarios, elaborar un manual de buenas prácticas para evitar la contaminación etc. Los operadores tienen que dejar de competir entre ellos haciéndose atractivos al tejido industrial y la Autoridad Portuaria tiene que dirigir una estrategia comercial encaminada a recuperar cuota de mercado respecto a otros puertos, modernizar la infraestructura y localizar las ayudas institucionales necesarias para facilitar una actividad que todos los trabajadores queremos que continúe en unas condiciones laborales y medioambientales dignas para la comunidad portuaria y su entorno.
LAB cree firmemente en el futuro del Puerto de Pasaia dentro de la bahía y esperamos que su regeneración sea también la reorganización de las actividades portuarias acordando los puntos conflictivos con los ayuntamientos limítrofes. La inversión millonaria, con mucho menos de lo que se plantea gastar en el exterior, debe ir en este sentido, mejorando y modernizando la infraestructura para captar tráficos sostenibles y acordes con las condiciones inmejorables de Pasaia como muelle de abrigo. En esta labor el nuevo presidente Lucio Hernando (el tercero en cinco años) nos tendrá a su disposición, pero también le recordamos que no se puede desarrollar una gestión eficaz y competitiva con una plantilla bajo mínimos y mal pagada.
Por último creemos también que los mejores años de este puerto han sido también los que han coincidido con la capacidad de negociar aquí las condiciones laborales. El futuro de este puerto no puede estar en manos de Madrid. La actividad portuaria tiene que ir ligada al desarrollo industrial y económico de Oarsoaldea, Gipuzkoa y Euskal Herria. Y para eso las decisiones estratégicas políticas y sociales se tienen que decidir en el mismo ámbito, y no en el Ministerio de Fomento de España.
Donostia, 3 de noviembre de 2011