El proyecto de Tranvía planteado para Jerusalén por el gobierno de Israel, ha suscitado una gran polémica internacional. Existe un consenso general respecto de la ilegalidad del proyecto, tanto por su trazado, como por ser discriminatorio al ser de uso exclusivo de “Colonos” en tierra Palestina.
Consideramos que cualquier proyecto de tranvía, de cualquier ciudad del mundo, y por supuesto de Jerusalén, debe de producirse respetando los derechos humanos y la legalidad internacional. Tanto el plenario, como el Consejo de seguridad de la ONU, así como la Corte Internacional de Justicia, a través de diferentes resoluciones, se han mostrado en contra de la ocupación de los territorios donde transcurrirá el citado tranvía.
Creemos que cualquier proyecto de tranvía en Jerusalén, debe de contar con el apoyo de los legítimos representantes del pueblo Palestino, ajustándose a la legalidad internacional. En este caso es obvio que el proyecto es totalmente rechazado por la parte Palestina. No entendemos que puede aportar en positivo a CAF, realizar trabajos en contra de la legalidad internacional, de la ética y la solidaridad, y cuya realización supondría un fuerte rechazo social tanto en Euskal Herria, como en el mundo.
Teniendo en cuenta todas estas circunstancias, hemos instado a la dirección a renunciar a la citada licitación.